Freedom House publica todos los años, desde 1972, indicadores sobre los derechos políticos y las libertades civiles en el mundo. Cada nación recibe calificaciones, en esos dos aspectos, en una escala de 1 a 7 y la puntuación ponderada determina la categoría y color que exhibirá en el Mapa de la Libertad. En el del 2011, nuestro país continúa de color verde, con una nota de 2 que nos ubica con los países libres. Esta membresía corresponde a los que tienen entre 1 y 2.5 y la recobramos en 1998, luego de que la crisis que siguió las elecciones generales de 1994.

La evolución de nuestros indicadores considero que reflejan de manera adecuada la realidad.  En los años finales del período de los 12 años del Presidente Balaguer, nos calificaban como Parcialmente Libre y descendió hasta 4 la puntuación en la variable Derechos Políticos (PR).  Esto es consistente con los intentos autoritarios del gobierno por mantenerse en el poder. Fotos de militares y policías con calcomanías reeleccionistas en la culata de los fusiles, a horas de las votaciones, es probable que influyeran en las reuniones para calibrar el libertómetro. A partir del triunfo del PRD, en 1979, el país pasa al grupo Libre y mejora notablemente su puntuación, principalmente en las libertades políticas. En este aspecto obtuvo la nota máxima en 1982.  La puntuación de uno la pudo conservar a pesar de que el partido en el gobierno perdió las elecciones generales de 1986. Por el  accidentado ocaso del nuevo período del Dr. Balaguer,  nos vuelven a pintar de amarillo en el Mapa de la Libertad. Ahí estuvimos con los países Parcialmente Libres, con notas entre 3 y 5 en sus libertades civiles y políticas, hasta mediados de 1998.

Freedom House tiene un sesgo hacia las democracias de tipo liberal que la lleva a clasificar como autoritarios, o no libres, a países socialistas y monarquías absolutistas. En la mira tiene a democracias autoritarias de nuestra región, como Ecuador y Venezuela, que las coloca entre los parcialmente libres. Ambos presidentes, sin embargo, tal vez no hagan mucho caso a una publicación donde Estados Unidos tiene un récord perfecto en derechos políticos y libertades civiles desde 1972.  Especialmente si como cibernautas o twitteros tienen a LewRockwell.com entre sus sitios favoritos.

En el análisis de la tendencia para República Dominicana, en el informe del 2010,  la institución nos colocó una flecha hacia abajo. No cayeron bien las posiciones constitucionales sobre las definiciones de la vida y la familia, que excluyen el aborto y los matrimonios entre parejas de un mismo sexo, críticas con las que también encabezan el más reciente.

En 1972, la entidad ubicaba al  54% de los países caía en las categorías de Libre y Parcialmente Libre. Para el 2011, a dos de cada tres países. Notable avance, innegable, crédito que con asombro vemos reclamar a los organizadores de cruzadas militares por parte de los países punteros.