Seguro que a partir de enero escucharemos alguna de estas frases, mientras recorremos L’ Dolcerie, Marocha y Porter House; en el Country o yendo de Sophia a Neptuno, y de ahí "a Romana", así, sin artículo, don Radha, que lo suyo es Isabel Villas y su Santiago.

Incluso hoy, a las 9:00 pm, en Lucia 203, Audrey Campos y Victor Victor, al cantar, citarán más de una de estas frases, y hasta es posible que Vitico le pregunte algo a la “Brisa de la tarde, al astro que alumbró aquel delirio”, y hasta al cielo y hasta a Dios, que es sí sabe de martirios.

Las que siguen, son frases de creatividad extrema, paridas del alma en olla de un rico frenado en sus consumos, pero negado a admitir su “malaria” ante sus amigos.

Disfruten esta demostración del talento humano para negar una olla:

“Decidimos cambiar a los niños de colegio, esos bilingües ya no enseñan valores. Le vamos a hacer caso a Margarita.”.

“Yo corté con el "bonche" de los viernes, uno termina la semana fundido”. ( A esta no le hagan caso que Vitico espera. p.m.).

“Está comprobado que hablar mucho por celular produce cáncer”.

-“Con este desastre de calles, no se justifica cambiar de carro, además, prescindí del chofer, no resisto la conversadera”.

“Decidimos no darle a los niños tantos regalos, después no aprenden a valorar nada”.

“¿Ustedes no han probado esos vinos de caja TetraPack? Son buenísimos”.

– “El MacAlbert es un Whiskazo. Por cierto, ¿han visto cómo ha mejorado el ron dominicano?”

– “¡Qué pereza! Punta Cana se ha convertido en área de congresos y convenciones”.

– “¡Cómo son de decorativas las artesanías!”

– “Estamos felices sin muchacha, al fin recuperamos la privacidad”.

– “Este año no salimos. La Capital es deliciosa en diciembre, Vitico a Pavel cantaran en Lucía los jueves, y además, esos conciertos del parque Mirador Sur lo hacen sentir a uno como en Central Park”.

– “Este año nos pusimos de acuerdo en no dar regalos. Lo importante de la Navidad es estar en familia”.

-“Tuvimos que vender la villa de Samaná, porque ya estamos “jartos” de los tapones en la carretera”.

– “Me conseguí un sastre buenísimo”.

– “Cancelamos el viaje a las Bahamas. ¿Y si viene uno de esos huracanes fuera de temporada?”

“El corte clásico nunca pasará de moda. Eso de Versace, Armani y Boss es para disfrazar actores y modelos”.

– “Estoy andando en el Mazdita 6 de mi hija mientras llegan los repuestos del Mercedes”.

– “El médico me prohibió los langostinos”.

– “Ya no vale la pena volar en Clase Ejecutiva. ¿Pagar más para tener que soportar marrulleros al lado de uno?”

-“¿El BOTERO? Nos lo pidieron prestado para una retrospectiva en Europa”.

– “Estoy viviendo donde los suegros mientras remodelamos el apartamento.”

Y, finalmente, la más doliente y mentirosa de todas: "Me tocó aceptarle el puesto a Danilo, ya era tiempo de dejar de ser tan egoísta y prestarle un servicio a la Patria."

Qué oscuro están los días. ¿Irá a amanecer? Ya veremos, mientras tanto, como dicen en Andalucía, la bella: “A vivir, que son dos días”.