Mi abuelo me decía, apenas siendo un joven de 15 años y consciente de las atrocidades del régimen trujillista, que no me metiera en problemas ni me juntara con nadie que hablara de política porque la familia correría peligro.  Era el año 1960.

Mira mi hijo, Trujillo tendrá sus cosas malas, pero es el único hombre con capacidad de gobernar a los dominicanos. Y así pensaba una gran mayoría de la población, incluyendo intelectuales de la época.

Esa experiencia para gobernar fue el argumento que muchas dictaduras usaron para perpetuarse en el poder. Trujillo fue uno de los mejores ejemplos cuando se argumentaba que reconstruyó al país después de huracán San Zenón y que nadie tenía experiencia para sustituirlo. 

Pero también muchas falsas democracia, como la del PRI en México, que gobernó por 70 años consecutivos con elecciones fraudulentas ya que ningún partido de la oposición tenía experiencia para dirigir el país.

Pero lo que mas duele es que muchos dominicanos justificaron el golpe de estado a Juan Bosch porque no tenia experiencia para gobernar. El más ético, transparente, democrático y esperanzador gobierno que ha tenido este país fue derrocado por comunista, inexperto en el manejo del Estado y calificado de ateo por la Iglesia.

Toda una sarta de mentiras que justificaron el derrocamiento de Bosch, cuyas funestas consecuencias estamos pagando hasta el día de hoy.

Y ahora el PLD y su candidata vicepresidencial hablan de que ganarán las elecciones porque son el equipo mas experimentado.

¿Experimentados en qué? En robar, no tenemos dudas, en endeudarse hasta la tambora, tampoco, y en manejar la administración pública como un vertedero de basura, mucho menos. Eso sin contar el soborno y el tráfico de influencia para controlar los medios de comunicación y los demás poderes del Estado.

Leonel Fernández, esposo de la vice ¿Tenia experiencia para gobernar cuando subió al poder en el 1996? Ninguna y a pesar de eso fue el mejor periodo de Fernández de sus doce años en el poder, porque los dos siguientes fueron verdaderamente cuestionables por la corrupción y el absolutismo.

Después de que han agotado todos sus cartuchos para relanzar sin éxito la figura de Gonzalo Castillo, cuya experiencia para gobernar descansa en su capacidad para defalcar los recursos públicos, usan este argumento para justificar un peligroso continuismo que podría desencadenar en una tormenta política en este país, cansado de tantas vagabunderías. De tantas mentiras y engaños. De tanta corrupción. Y de tantas injusticias.

Y hablando de experiencia, esta sobra en el PRM, y basta mencionar a Doña Milagros Ortiz Bosch, Doña Ivelisse Prats de Pérez y Rafael Santos en el área educativa, Pedro Silverio, Alejandro Fernández, Eduardo Tejera, Miguel Ceara Hatton, Arturo Martínez Moya, Julio Caminero, Julio Cross, José Rijo Presbot, Rafael Espinal, Feliz Santana y Apolinar Veloz en el área económica y de políticas públicas, o Víctor Atallah, Jesús Feris Iglesias, José García Ramírez y Plutarco Arias en la salud, y ni hablar de la agricultura donde esta el decano en la materia, mejor conocedor del campo dominicano, el exministro más exitoso y con mas de 50 años de experiencia. Me refiero al expresidente Hipólito Mejía, que aglutina las mejores mentes del sector agropecuario. 

¿Cuál ha sido el mejor sindico que ha tenido la capital? Un joven sin experiencia llamado David Collado, que hizo historia y cuya exitosa gestión será recordada por siempre. Lo mismo será con Carolina Mejía, una joven “sin experiencia” que hará del cabildo capitaleño un orgullo para todos.

La mejor parte del cuento es que si comparamos a Luis Abinader con Gonzalo Castillo, la diferencia en pensamiento, inteligencia, capacidad para gobernar, ética y entendimiento de los problemas nacionales, parecen tan distantes que no vale la pena ni mencionarlos.