La vida amorosa de los hombres en el poder resulta original y hasta divertida, sobre todo cuando se trata de los presidentes latinoamericanos, muchos de ellos poco agraciados como para despertar grandes pasiones.

Pareciera que tras llegar a la presidencia de la república u otras posiciones de poder, ciertos hombres se transforman, emergiendo de ellos una suerte de sexapeal o libido desconocida que permite que sus penes, comunes y corrientes, se conviertan en una especie de miembros reivindicativos, que transforman todo lo penetrado, dando características y condiciones especiales a aquellos-as que entran en contacto con el mismo (pene).

América Latina, escenario del machismo puro, registra ciertas historias sobre la sexualidad de políticos, que van desde los dictadores que inspiraron a GarcíaMárquez “El Otoño del Patriarca”; destacándose Juan Vicente Gómez, en Venezuela con más de 40 hijos, sin que jamás durmiera en la cama con mujer alguna. O Trujillo en República Dominicana, con su capacidad copular con quien y cuando quisiera, llegando a tener hijos reconocidos, naturales y desconocidos por ser las madres casadas.

En época de democracia, las historias de hijos productos del poder son diversas: cabe destacar al ex obispo y ex presidente Fernando Lugo en Paraguay (2008-2012),que asumió varios casos de paternidad tardía vía ADN – siendo destituido por su mala gestión de gobierno.

Cuando lo que está en juego es la corrupción, lo de la paternidad poco va a importar en una sociedad donde el tráfico, violaciones y muertes de mujeres en manos de sus parejas es la más alta de la región latinoamericana

No existen registros de que un escándalo de cama ponga en peligro la gestión presidencial y la “ejemplar vida familiar” que suelen llevar estos presidentes y sus gabinetes de diversos gustos sexuales. La doble vida es parte del prestigio del macho politicum: esperar que el coito impetuoso sea causa de dimisión es pura ficción.

No obstante la historia y el ADN están demostrando, que los presidentes corren el mismo riesgo que corren los machos comunes y corrientes ,que fornican a ultranza, con casi todo lo que se les pone por delante, y a veces se les ponen algunas cosas , que ellos" ingenuos e inexpertos" no saben manejar.

Ese es supuestamente el caso del Presidente de Bolivia ,quien recién perdió el referéndum para reelegirse. Evo, quien quizás atraído por la manzana y abrazado por la serpiente, se ha convertido en un extraño objeto sexual, acosado por mujeres“malvadas” – tres hijos en tres camas distintas. Él que ha sido calificado de “dudosa” sexualidad por sus detractores, hoy es defendido por su vice presidente como “padre engañado”, fase novedosa del mandatario, tras tener un noviazgo en 2007-2009 con la empresaria Gabriela Zapata. Esta última hoy en la cárcel, acusada de enriquecimiento ilícito, tráfico deinfluencia, usó el nombre del presidente para llegar a firmar contractos desde una oficina dependiente de la presidencia, con una empresa china de la cual era gerente,suplidora del Estado por más de US 500 millones de dólares.

El escándalo surge tras la publicación del certificado de nacimiento de un niño, hijo de Morales y Zapata. Y que Evo dijo estaba muerto… Lo que fue desmentido por la familia y la abogada de la exnovia, saliendo publicadas fotos de Morales en 2015 con Gabriela. Evo en gesto de paternidad asumida, tardía, declaró:  “He sido engañado.” “Si el niño está vivo, es una alegría para mí. Es como una bendición.” “Si la familia me lo permite, quiero recoger al niño”, haciendo énfasis en que“Todo esto es producto de una trama para hacerme daño.”

Cuando lo que está en juego es la corrupción, lo de la paternidad poco va a importar en una sociedad donde el tráfico, violaciones y muertes de mujeres en manos de sus parejas es la más alta de la región latinoamericana.

Es así como, un día después del allanamiento a la residencia de Zapata, el propio presidente deposita una demanda a su ex pareja por violencia psicológica al niño (que parece existe), lo que prohíbe por ley que se hable del niño o que se presente a la prensa.

Pero en América latina, dónde la gestión y sexo están estrechamente vinculados, las historias de amantes de presidentes que se aprovechan del poder, se manejan desde una doble moral: es bien visto tener amantes ,aunque a  algunas se les va la mano. Otras incluso llegan a ser esposas y hasta terminan quedándose con cuantiosas fortunas sacadas del pueblo.

Pero tener un hijo y negarlo, mediante la desaparición física, es una excusa que ha puesto a Morales en una situación que evidencia, que cualquier presidente exitoso pone en riesgo su mandato, al permitir que sus amantes manejen asuntos de Estado y, se enriquezcan gracias al pene reivindicativo.  Lo que les conduce a usar irresponsables argumentos, al estas (amantes) revelarse.

Cuando sabemos que los presidentes también tienen sus historias de embarazos -buscados, preparados y/o accidentales -, a pesar del atractivo que emanan, tienen simples penes comunes y corrientes.

Es probable que al final del novelón, Evo sea un presidente víctima (un pobre padre soltero) de un gobierno corrupto más de la región.