La figura del diablo ha existido en todas las religiones y culturas solo que con nombres diferentes. La palabra diablo viene del griego diábolos que representa a un “acusador”, “difamador” o “calumniador” y está compuesta del prefijo dia- que significa “a través de” y ballein que representa “arrojar” o “tirar” mentiras, prejuicios y otros males. En el budismo la figura equivalente al diablo es Mara quien intentó tentar al profeta Buda al igual que como lo hizo el diablo con Jesús en el desierto cuando duró 40 días y 40 noches.
En el hinduismo existe lama o Yama quien también es la figura que representa el mal y en el zoroastrismo existía Angra mainyu. La representación de Satanás o el diablo que asumió el cristianismo es la correspondiente al dios baco a quien se representaba como un ser grande, negro y con cuernos. Otros dicen que es Bafonet aunque Baco y Bafonet tienen en común que eran conocidos como los padres de la fertilidad en sus respectivas culturas y mitologías y ambos eran representados con cuernos.
Ahora bien ¿por qué el cristianismo toma las imágenes de dioses paganos para equipararlos con Satanás? Todos sabemos que la mayoría de fiestas cristianas fueron sustituciones de fiestas paganas y la lucha contra el paganismo fue la principal tarea del cristianismo en el sentido de que se debía cambiar la idea de varios dioses por la del Dios único. Por eso las fiestas dedicadas a Baco las designaron como diabólicas o cultos a Satanás porque ya habían convertido a Baco en Satanás.
Es en este contexto que la fiesta de Halloween sea considerada como satánica porque allí decían que se congregaban las brujas que también se reunían en los aquelarres. La palabra Halloween literalmente significa "víspera del día de los santos" porque estas fiestas se celebraban exactamente el día antes del día de los santos.
Huelga decir que el Papa Gregorio III instauró la solemnidad del día de los santos un primero de noviembre, precisamente para sustituir la fiesta pagana más importante que era el año nuevo celta que tenía lugar del 31 de octubre al primero de noviembre.
Pero existe un problema peor en todo esto y es que para el cristianismo las brujas empezaron a ser una amenaza innecesaria porque nunca se tuvo claridad quienes eran brujas y qué hacían; lo que había detrás era una patología misógina.
Ellos llamaban brujas a las mujeres que se reunían de forma clandestina para tener acceso a conocimientos que les eran permitidos solamente a los hombres y que ellos llamaban aquelarre. También consideraban brujas a las parteras y a las mujeres que curaban con brebajes y cosas naturales.
Solo las mujeres eran las condenadas a morir. La forma de identificar si una mujer era bruja o no era un proceso terrible. Se le amarraba de pies y manos y se lanzaba al agua. Según las creencias las brujas eran tan livianas como el agua de manera que si la mujer al ser lanzada flotaba la sacaban y la asesinaban casi siempre quemadas. Si se sumergía era evidente que moría pero nadie pagaba por la confusión, sino que se decía que iban al cielo porque no eran brujas. Se estima que por esta práctica murieron entre 50 y 100 mil personas de las cuales el 80% eran mujeres.
Creo que el día de Halloween, debería ser una conmemoración por las injusticias que contra mujeres se cometieron bajo ese alegato y que en vez del cristianismo condenar diciendo que es adoración a Satanás deberían hacer un mea culpa cada 31 de octubre.