Cuatro empresas internacionales de prestigio han publicado encuestas en los últimos 60 días. Mark Penn, quien ha asesorado a Bill Clinton, su esposa Hilary y a Tony Blair entre otros, y quien fue el primero en ejecutar trabajos de este tipo en nuestro país desde 1962, realizó trabajos de campo del 6 al 10 de enero para Noticias SIN. La Gallup, también con años de servicio en el país, hizo preguntas entre el 24 y el 27 de enero para el periódico Hoy. Joel Benenson, quien trabajó para Mark Penn pero luego se separó y asesoró a Obama y aún lo hace, encuestó para el Palacio Nacional entre el 3 y el 8 de febrero. Greenberg, cuyo veterano dueño está casado con una importante congresista norteamericana, hizo sus trabajos entre el 12 y el 18 de febrero para Diario Libre. Todas estas encuestas fueron cara a cara, visitando a las personas en sus hogares. Se han publicado otras de menor confiabilidad en base a preguntas por teléfono y una hasta por whatsApp.

Los resultados no difieren mucho. En ese mismo orden Danilo Medina ha sacado 57%-51%-59% y 54%, es decir con una ligera tendencia a la baja. Luis Abinader ha sacado 27%-36%-32%-34% con una tendencia en crecimiento. Ninguno de los otros cinco candidatos ha sacado siquiera un 2% de los votos y los indecisos son muy pocos.

Estas encuestas también evidencian que hasta los oposicionistas perciben que Danilo Medina ha hecho un buen trabajo, sobre todo en educación y salud, pero que es débil en la lucha contra la corrupción y el crimen. La de Greenberg cita que solo un 71% de los que votaron por Hipólito Mejía hace cuatro años ahora favorecen a Abinader, por lo que el 29% ha trasladado su voto a favor de Danilo Medina o no votará. Eso refleja el fraccionamiento del PRD entre PRM y PRD. Los que reciben las tarjetas de Solidaridad favorecen a Medina en un 73%-20%. Y es que los empleados públicos y los que tienen esas tarjetas representan ya una proporción muy alta del total de los votantes.

En un artículo que publicamos en este periódico el 21 de julio pasado dijimos: "Como no se prevé un descalabro económico ayudaría mucho a Abinader si surge con claridad un gran escándalo de corrupción atribuible directamente a la gestión de Medina, tal vez resultado de investigaciones que se están efectuando en Brasilia y/o Washington". El brasileño llegó, a los seis meses. El origen portugués de la campaña del 2012 se evidenció cuando utilizó "hacer lo que nunca se hizo", cuando en español lo correcto es "hacer lo que nunca se ha hecho". Si se pudiese probar, lo que no se ha hecho, que Odebrecht financió parte de la campaña del 2012 del Presidente Medina a cambio de ser favorecido con los grandes contratos, a expensas del contribuyente, eso perjudicaría mucho la última etapa de la campaña de Medina. Pero hasta ahora el asesor brasileño solo ha admitido que Odebrecht dio dinero para la campaña del fenecido Chávez. El escándalo americano se ha limitado, discretamente, a quitar visas.

En un artículo que publicamos el 26 de enero en este mismo periódico al analizar la encuesta de Mark Penn le sugerimos a los estrategas de Abinader que como el punto débil de Medina era el tema de la violencia y el crimen: "Deberían prometer lograr el apoyo técnico de la policía de Nueva York para asesorar a nuestros policías, más cuando en esa ciudad se ha reducido mucho el crimen". Parece que me leyeron, pues han contratado al ex Alcalde Guiliani y Abinader, inteligentemente, ha declarado que utiliza un asesor extranjero experto en la lucha contra el crimen cuando Danilo tuvo como asesor a una persona que está detenida.

Faltan solo 71 días para las elecciones y la ventaja de Medina sobre Abinader fluctúa entre 15 y 30 puntos, pero los vientos soplan un poco a favor de Abinader, con los escándalos de corrupción y es en eso que debe concentrar sus ataques. Medina, por su lado, pronunció un buen discurso el 27 de febrero. Ni el escándalo brasileño, ni ese discurso, han sido medidos todavía por las encuestas.