La semiótica del cuerpo es un dominio de investigación que se fundamenta en los aportes de la Kinésica y la Proxémica. Gestualidad y métrica espacial son instancias de expresión y sistemas antropológicos de productiva significación. El cuerpo es la base de toda teoría cultural y de las semiosferas humanas. (Ver culturología, semiótica de la cultura. Perspectiva de Iuri M. Lotman (1998-2004,vols. 1, 2, 3 (trad. en  Ed. Cátedra, Desiderio Navarro).

La tipología bajtiniana del cuerpo se hace visible en Mijail Bajtín y su círculo. (Ver, La cultura popular en la Edad Media y el Renacimiento. El contexto de Francois Rabelais. (1987); ver Alianza Universitaria; y ver, también, Mijail Bajtin: Estética de la creación verbal, traducción del ruso al español hecha por Tatiana Buvnova para Siglo XXI, México 1985.

Bajtín es el gran teórico del cuerpo en la semiótica rusa y soviética. Lo carnavalesco y lo festivo son categorías histórico-culturales basadas en el signo-cuerpo. El cuerpo es según Elina Matoso, un territorio escénico. Desde la psicoestética del cuerpo y los lenguajes corporales, la profesora argentina hace una mise au point de las posibilidades expresivas del cuerpo.

La semiótica del cuerpo ligada a la performance cultural tiene en el Caribe insular una perspectiva integradora en los estudios escénicos, políticos, en la investigación antropológica y en el arte contemporáneo.  La crítica y la fenomenología del cuerpo constituyen  instrumentos de investigación estético-culturales efectivos, significantes y comunicativos.

Umberto Eco ha mostrado algunos catálogos corporales en dos obras significativas para la historia de la cultura: Historia de la belleza  e Historia de la fealdad. En ambas, el cuerpo adquiere un valor semiocultural y estético-gestual.

El impulso y la importancia que ha cobrado la performance como semiótica especial, en las artes visuales contemporáneas se hace visible en el bienalismo actual, donde los híbridos artísticos presentan resultados de todo tipo: políticos, poéticos, culturales, identitarios, comunitarios, ambientales, sociocomunicativos,  familiares y antropológicos, entre muchos otros.

La antropología teatral como propuesta llevada a cabo por Eugenio Barba y por el desaparecido director de teatro polaco Jerzy Grotowsky, ha proporcionado en América Latina y el Caribe buenas  y efectivas experiencias en cuanto al teatro y las performances culturales. La visita del Odin Teatret a la República Dominicana en el 2003 y los repetidos viajes de Eugenio Barba a América Latina se han constituido en experiencias estimables desde el punto de vista cultural y artístico.

El trabajo llevado a cabo en el ISTA por Marco De Marinis, ha producido un efecto multiplicador de la semiótica del teatro, del espacio y de la performance, a tal punto que disponemos ya de asesorías, divulgación y búsqueda de base para los diversos estudios de la representación.

La perspectiva que para los estudios semiológicos abrieron en el pasado siglo los fundadores Ferdinand de Saussure y Charles Sanders Peirce debe tenerse en cuenta para abordar cualquier tipo de vocabulario en el marco de los sistemas de signos o sistemas significantes y semiósicos.

De Marinis, profesor de la Universidad de Bologna, ha hecho hincapié en cuanto a lo que hoy se entiende por semiótica del espectáculo y por teatrología. (Ver, Práctica e historia. Problemas metodológicos de los estudios teatrales (Ponencia presentada en la Quinta Conferencia sobre Teatro y Estudios teatrales en el siglo XXI, entre el 28 de septiembre y el 1ro de octubre del 2005). (Ver, Osvaldo Pellettieri: Texto y contexto teatral, Ed. Galerna, Buenos Aires, 2006, pp. 23-30).

La problemática de la performance en República Dominicana ha logrado crear equipos de discusiones y acciones artísticas híbridas de alta significación. Un ejemplo de ello lo tenemos en los Encuentros de Performance celebrados en Puerto Plata con invitados nacionales e internacionales y con la participación de críticos de arte como Amable López Meléndez, Danilo de los Santos, Eliú Almonte, Oscar Hungría y otros artistas visuales.

En el contexto de la educación formal, la performance ha tenido un rol beneficioso para la educación primaria, intermedia y media o preuniversitaria, siendo el trabajo del cuerpo una práctica que ha obligado a cambiar algunos instrumentos y mecanismos psicológicos de enseñanza en la praxis educativa  y mediante  el desarrollo humano a través de la Educación artística.