Hoy en día desplazarse por la capital de la República Dominicana es una pesadilla; una experiencia que angustia a los cientos de miles de personas que residen en el centro político-administrativo de la nación, mortificando las actividades cotidianas y complicando la movilidad de los que utilizan el Distrito como transición entre un punto y otro de la nación.
Las calles y avenidas en la actualidad son las mismas de la pequeña ciudad de mediados del siglo XX, con la diferencia de la población y las actividades que hoy se realizan. Por esta razón los anchos de vía son insuficientes para contener el enorme parque vehicular que se moviliza a diario por la ciudad; si esto lo contrastamos con la nefasta práctica de ocupar las calzadas, aceras o espacios de vía para el aparcamiento indiscriminado, entendemos por qué la ciudad no da abasto y por ende como esta situación contribuye a magnificar los entaponamientos en el casco urbano.
Es un hecho fehaciente que la eliminación de los parqueos en la vía pública permitirá aumentar considerablemente la capacidad de las vías, repercutiendo en una mejoría de la circulación vehicular; para que esto sea posible deben producirse algunos cambios importantes en la dinámica urbana que ha imperado.
Aunque la práctica de estacionarse en cualquier lugar de la vía es común en nuestro país, a nivel internacional no es lo mismo; numerosas estrategias se han desarrollado para satisfacer las necesidades de la población y al mismo tiempo descontaminar tanto visual como físicamente las calles.
Para lograr este cometido las ciudades han diseñado sistemas de estacionamientos para mejorar los desplazamientos en las calles, el fomento de nuevos nichos empresariales con la construcción de aparcamientos con perfil público-privado, de igual manera han fortalecido la inversión en la oferta estatal de transporte colectivo, adecuando las paradas, mejorando los espacios públicos y brindando seguridad en las aceras; finalmente otras ciudades desarrollan proyectos que gravan impositivamente los desplazamientos motorizados por el casco urbano.
Estas medidas ayudaran a descongestionar la ciudad de vehículos, contribuyendo a reducir los niveles de contaminación, mejorar la temperatura a nivel urbano, disminuir los niveles de peligrosidad y por ende reducir los accidentes en la vía.
La implementación de esta y otras medidas permitiría avanzar en la eliminación de los parqueos en la via publica, la cual debe realizarse de forma gradual, beneficiando directamente a una población necesitada de desplazarse con eficiencia por las calles y avenidas de la ciudad.