MDE: Ministerio Dominicanos en el Exterior.  De entrada,  para algunos podría ser considerado como otra potencialmente disfuncional instancia burocrática para sobrecargar más al Estado. Entonces ¿Un Viceministerio? ¿O nada a un alto nivel en el Estado, como ha sido hasta ahora? 

Fuera de cualquier consideración de propuesta burocrática lo cierto es que las y los dominicanos en el exterior somos los de aquí, allá. Es el país fuera de las fronteras, lo cual se  asocia a la propia palabra diáspora que en  su etimología griega significa una comunidad, en este caso una nación, que se dispersa en el mundo.

Es extraordinaria la riqueza que produce  integrar en sus vidas las más variadas experiencias, conocimientos y habilidades que implica ese desafío de establecerse en un lugar diferente al de  su origen, en muchos casos muy diferente.

Son tantas las grandes oportunidades que se pueden derivar de una política de desarrollo orientada hacia las y los dominicanos en el exterior incondicionalmente bidireccional, lo que equivale a decir aportarles y recibir sus aportes; partiendo de lo que corresponde a la identidad, en los sentimientos comunes, en una historia y origen común, de un percibir y vibrar al unísono, desde la música, nuestras peculiares formas de expresión oral y escrita, la cocina, la literatura hasta los más altos niveles, el arte, deporte o las visiones compartidas respecto a cómo se ha de concebir el desarrollo del país.  Cargando  a las segundas y terceras generaciones nacidos fuera de la patria con ese respirar que nos distingue ante las demás naciones del mundo. Junto a ese sentir son muchas las formas de colaboración asociadas además a las variadas actividades  en sentido general atesoradas mediante el trabajo duro y honesto.

De acuerdo a estudios del Banco Mundial la República Dominicana ha llegado a ser el tercer país de América Latina con mayor envío de remesas, aportando a la economía más de 7 mil millones de dólares al año; pero preferimos decirlo de último, pues al tiempo que es lo que más se destaca en una óptica unidireccional, y que  por lo anteriormente dicho no es lo más importante ante el extraordinario hecho de conectar desde el Estado en todas las  manifestaciones con más  de 2.5 millones de dominicanas y dominicanos de aquí, allá.

Estos simples comentarios, reflexiones y hasta provocaciones como las del inicio tienen como principal razón de ser procurar planteamientos de los candidatos y candidatas ante quienes solicitamos iniciativas e innovaciones respecto a lo que podría ser una auspiciosa vía para el efectivo desarrollo de la República Dominicana aquí y allá.