Predomina la violencia en las calles de Chile, Ecuador, Colombia, México, Irak, Irán, París, Hong Kong, el Líbano y Haití, la cual es la que más nos afecta, pues estimula migración de indocumentados y estorba nuestras exportaciones.

Pero, ¿por qué las cosas están tan tranquilas en la República Dominicana? ¿Cuáles son los amortiguadores que impiden que nuestras masas se alteren? ¿Cuál es el Valium nuestro de cada día que nos mantiene sedados y tranquilos? Citemos a siete de ellos:

    1. El PLD ha inflado la nómina pública a niveles tales que, por vergüenza, ha dejado de publicar el dato sobre con cuántos empleados públicos contamos. Mientras más botellas, más fuerte es la “corporación PLD” y esos servidores temen perder sus empleos si se manifiestan contra el gobierno.
    2. Las tarjetas de Solidaridad, que abarcan una alta proporción de los votantes, son otro Valium. Si el jefe peledeísta del barrio lo ve a usted en una marcha verde, por ejemplo, corre el riesgo de perderla, quedándose sin su Valium.
    3. Las remesas que recibimos desde el extranjero suman más de la mitad de la que pagamos en impuestos a nuestro gobierno los que vivimos en el país. Exceden lo que ese gobierno paga en sueldos, jubilaciones y subsidios a la población y ese “maná Valium” es gratuito, pues la pagan muy generosamente los que se fueron.
    4. Más del 20% de nuestra población se ha ido a vivir al extranjero y no hay forma de sacar el avión y la yola del cerebro de nuestra juventud. Una válvula de escape, un amortiguador eficaz de nuestras frustraciones. Las encuestas indican que el grueso de nuestra población desea irse “a los países”.
    5. Los más pobres en nuestro país son los haitianos indocumentados. Aunque serían los que deberían protestar más, no lo hacen, pues al ser indocumentados, podrían ser deportados. Los dominicanos indocumentados que residen en Nueva York tampoco protestan públicamente.
    6. Llevamos once años corridos endeudándonos en el extranjero. Ese es otro Valium, pues sustituye nuevos impuestos y políticas de austeridad, pólvora segura para la violencia callejera. Cada niño dominicano que ahora nace, como nos lo recuerda Juan Bolívar Díaz, no lo hace con un pan bajo el brazo, sino con un pagaré de 5 mil dólares, pues esa es su cuota de repago de una deuda externa que traslada, difiere, la crisis de una generación a otra.
    7. Finalmente, está el crecimiento mismo de nuestra economía, el del PIB, el más alto (junto con Panamá) y, además se ha logrado con estabilidad de precios y esa combinación genera nuevos empleos. Otro Valium. En Chile una de las pancartas más cortas pero más elocuentes, enarboladas en las calles, es la que proclama: “Abajo el PIB”.

Sigamos recibiendo el Valium nuestro de cada día, pero también mantengamos cerca un buen inventario de gases lacrimógenos.

P.D. El Valium, o diazepam es un fármaco derivado de la 1,4-benzodiazepina que actúa como modulador alostérico positivo de los receptores GABAA con propiedades ansiolíticas, miorrelajantes, anticonvulsivantes y sedantes.​