“Mira quién llegó el marío de tu mujer, si tú va a pelear entonces empieza a resolver, ella no es solo tuya, también es mía, yo solo te lo informo por si no lo sabías”.

Lo que usted acaba de leer no es la invitación a batirse en un duelo del viejo oeste, es el estribillo de una canción del cantante urbano Don Miguelo. Cuando uno ha pensado que lo ha visto todo, estos jóvenes tienen la capacidad de sacarnos de nuestra anomia para sorprendernos.

Particularmente la canción me parece abusiva y violenta pues relata una historia que no me parece, nadie en su sano juicio sería capaz de realizar, sin embargo me ha servido para interpretar muy bien los escándalos de corrupción en la justicia dominicana de los últimos meses, la reacción de los policías ante quienes se manifiestan y protestan, y para entender el rompimiento de la alianza del Partido Reformista con el PLD y su acercamiento al PRM.

Cuando un amante se atreve a desafiar al esposo esto puede obedecer a dos cosas: o el amante es alguien con mucho poder y se cree por encima de todo o el esposo es muy débil. Esto provoca una reacción machista y violenta donde no prima la razón sino el poder.

El pueblo, dueño y marido de la justicia, ha sido muy permisivo permitiendo que la administren amantes de pacotilla que ven en ella solo la razón para lucrarse y saciar su gula cometiendo decenas de hechos bochornosos.

En una situación de infidelidad quien está haciendo las cosas mal no es la víctima, sino el victimario. El problema aquí es que cuando el afectado protesta se encuentra con un come hombre que no solo es capaz de retarlo, sino de decirle en su propia cara “ella no solo es tuya, también es mía”.

Las agresiones de la policía con los que se manifiestan ante la OISOE es una evidencia de quien defiende con la violencia creyéndose los que tienen todo el poder y haciendo valer por la agresión que la patria que defienden las personas de las cadenas humanas, también es de ellos. Aquí el principal problema es que ellos la defienden en nombre de unos dueños o supuestos esposos que no han sabido respetarla, no le han dado el trato que se merece y acuden a la violencia porque no tienen argumentos demostrando por la fuerza que “ella no es solo tuya, también es mía, yo solo te lo informo por si no lo sabías”.

En el caso del Partido Reformista y su ruptura con el PLD quizás no se ha dado el hecho violento, pero si el pleito de dos que se reparten la misma mujer. En este caso la ruptura no ocurre porque no se compartan ideales, sino porque no pueden disfrutar de todo el cuerpo.

Su salida dibuja un escenario en el que ahora se va a pelear por la misma mujer haciendo valer con fuerza el “mira quién llegó el marío de tu mujer”.

Esperemos que la sangre no llegue al rio, en una campaña donde sabremos van a ocurrir bastantes hechos que presagian la bravuconada de muchos queriendo imponer su ley y buscando recordarle a los demás que “ella no es solo tuya, también es mía”

Y en caso de que alguno quiera imponer su fuerza procuren salirle al frente con argumentos suficiente plasmados en una canción que incita a la violencia y a la lucha de poder expresadas en unas letras desafiante “mira quien llegó el marío de tu mujer…”