El Senado de la República aprobó en dos lecturas consecutivas para convertir en ley el proyecto que dispone la exhumación y traslado al Panteón de la Patria, los restos del coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez, ideólogo del movimiento constitucionalista, quien lucho junto a otros militares, hombres y mujeres por el retorno del Profesor Juan Bosch al poder, derrocado siete meses después de haber sido juramentado como Presidente de la República Dominicana, precisamente electo en las primeras elecciones libres celebradas en nuestro País..
Transcurrieron 48 años para que este pro hombre sea reconocido en su justa dimensión, quien desde muy temprana edad manifiesta cualidades excepcionales, como hombre respetuoso con sus conciudadanos y como militar ejemplar, inspirado en los más altos valores morales y patrióticos, entregando su vida en defensa de nuestra soberanía, nuestra Constitución y sus principios de ciudadano honorable.
En estos momentos en que nuestra sociedad vive uno de sus peores momentos, donde la crisis moral ha tocado fondo por la ausencia de paradigmas de sacrificio y patriotismo, donde los actos de corrupción han aumentado a todos los niveles auspiciada por nuestras autoridades. Los dominicanos debemos hacer un alto y emular al coronel Fernández Domínguez, siguiendo su ejemplo de honradez, valor y sacrificio.
De nada sirve recordar la memoria de este militar intachable y proclamarlo Héroe Nacional, si nuestras autoridades, los llamados a dar el ejemplo solo piensan en beneficiarse de altos salarios, pasearse en vehículos de lujo e enriquecerse del erario, mientras la gran mayoría de sus conciudadanos viven en la indigencia. La memoria de este prócer debe ser recordada con acciones éticas y morales y proclamar a los cuatro vientos que nuestra soberanía y el bienestar de la Patria van a depender de la formación de una sociedad donde sus hombres y mujeres sigan el ejemplo de este hombre que se adelanto a su época.
No debemos olvidar que el hombre que vamos a exaltar al Panteón Nacional ofrendo su vida por defender nuestra Constitución y la Soberanía Nacional, los dominicanos que se identifiquen con el pensamiento del coronel Fernández Domínguez, cuantas veces sea necesario, debemos seguir su ejemplo y no permitir que nuestra Constitución sea tratada en ningún momento como un “simple pedazo de papel” y mucho menos ser cómplices de modificaciones que no beneficien a las grandes mayorías.
El pensamiento del coronel Rafael Tomás Fernández Domínguez, símbolo de patriotismo y valores democráticos, debe ser impartido a nuestros jóvenes en todas las aulas de nuestro País, especialmente en las aulas de nuestras Fuerzas Armadas, por ser sus hombres y mujeres los garantes de la Soberanía Nacional, la Constitución y las Leyes.
“….Y aquí estoy, respondiendo con la frente en alto, el honor multiplicado y la vergüenza como estandarte. Que me juzguen la Historia y la República.”
Coronel Fernández Domínguez.