A pesar de que la oposición insiste en la teoría del excesivo gasto público, lo cierto es que el gobierno  ha cumplido con las metas de los programas con el FMI y se ha sometido a una estricta disciplina asumiendo las medidas necesarias, algunas de coste político, dirigidas a preservar la estabilidad y el crecimiento económico. 

En las revisiones del acuerdo con el FMI correspondientes a marzo,  junio y septiembre del 2010 el gobierno cumplió con todas las metas fiscales y a diciembre  concluyó con un monto ligeramente menor  la meta del déficit por RD$44,300 millones(equivalentes al 2.3% del PIB)y una pequeña desviación se produjo en el sector eléctrico que elevó el déficit en aproximadamente 0.2% del PIB, mientras se cumplió con la meta del sector publico consolidado gracias a que el déficit cuasi-fiscal del Banco Central fue menor a lo estimado. 

Se habla del supuesto derroche de recursos por parte de esta administración, sin embargo el nivel del gasto ha estado definido por un primer acuerdo con el FMI desde enero del 2005 hasta enero del 2008 y de un segundo acuerdo desde octubre del 2009 hasta la fecha y a lo largo de esas dos etapas el comportamiento fiscal ha estado apegado a las metas y cuando se han producido desviaciones, pequeñas por cierto, ha sido básicamente por efecto del déficit del sistema eléctrico ya que 40% de los usuarios del servicio no lo pagan. 

En el programa actual se definió una primera etapa donde el gasto debía ser incrementado para estimular la economía, como era la predica del FMI y los gobiernos del G-20, pero a partir del segundo semestre del 2010 el gasto debería contraerse partiendo del supuesto de que no eran necesarios los estímulos fiscales. Y el gobierno ha cumplido con su tarea. 

Por eso mientras a diciembre del 2009 el déficit del gobierno central fue de RD$51,500 millones, equivalente al 3.5% del PIB, en el 2010 cerró en el entorno del 2.5% del PIB y  mientras a mayo del 2010 el gasto estaba creciendo a una tasa anualizada de 35%, comenzó a decrecer desde ese pico y a enero del 2011 los gastos eran iguales a enero del pasado año; a marzo el crecimiento anualizado era de apenas 8.3%, dando por resultado que desde octubre  los ingresos fiscales están creciendo a una tasa mayor que el gasto. 

Esta administración ha realizado un fuerte ajuste al pasar de un déficit de 3.5% del PIB en el 2009 a 2.5% del PIB en el 2010, ha reducido el gasto en 12% en lo que va de año, a marzo el déficit del gobierno central estuvo por debajo de la meta del programa con el FMI de RD$14,900 millones y está comprometido a cerrar este 2011 con un déficit de RD$33,500 millones equivalente al 1.6% del PIB. 

Es el comportamiento de una administración responsable, comprometida con el mantenimiento de un clima de crecimiento con estabilidad, a pesar del grave choque externo, y esa es una de las diferencias con los gobiernos del PRD que nunca han sido capaces de preservar ese escenario fundamental para los sectores productivos y el mantenimiento de la capacidad de compra de la gente.