La pandemia no detuvo la organización presencial de esta actividad que por más de treinta años viene realizando el Instituto Mises.  Se admitió para asistir presencial este año un número menor de estudiantes, profesionales y simpatizantes de las ideas de este centro dedicado a difundir la visión de la Escuela Austríaca de Economía.  En línea pude seguir nuevamente en vivo ese evento que me cautivó en el verano de 1990, pagando una suma simbólica de US$20 porque los gastos de la actividad se cubren con generosas donaciones privadas.

Del Instituto Mises y de Murray Rothbard me enteré por un amigo en febrero de ese año. Estaba a punto de salir de la Fundación Economía y Desarrollo cuando cayó por la oficina Jaime Álvarez, uno de los hijos del querido Don Cuchito.  Llegaba con dos libros y me dijo: “¡Que bueno que te encontré, porque te quería traer de regalo este par de libros!”

Uno era del mismo tamaño enorme y color marrón que Los Miserables, novela que ya tenía, había leído y memorizado algunos capítulos. Como también me sabía canciones del musical estuve a punto de empezar con “Reeeed, the blood of angry …” cuando veo que el título es Human Action y el autor Ludwig Von Mises.  Me lo presentó de forma corta y categórica: “¡Esto es Economía!”  Sin dejarme terminar de decir gracias, “¡Y éste es candela pura, el Manifiesto Libertario de Murray Rothbard! Ven a contarte de que se trata este armamento pesado para defender los mercados y la libertad”.

De inmediato empecé a leer esos autores, me entusiasmé con sus ideas y decidí asistir al próximo encuentro del instituto en California.  De ahí es que empiezo a traducir al español para publicar en la página Hablan Los Empresarios, en el periódico El Siglo, artículos de Mises, Rothbard, Hayek, DiLorenzo, Hazlitt, Block, Rand y otros autores poco conocidos.  En esa página que tan gentilmente permitía publicar Don Bienvenido Álvarez Vega a una asociación de jóvenes empresarios, sobre la Semana Mises 1990 escribí:

“Una de sus actividades más importantes es la celebración de un seminario anual para estudiantes y profesores interesados en la economía austríaca. Este año el seminario contó con la dirección de 16 excelentes profesores de esta escuela, entre ellos Murray N. Rothbard, Robert Batemarco, Walter Block, Hans-Hermann Hoppe y David Gordon.  Fue celebrado en la Universidad de Stanford del 7 al 14 de julio. El director del Instituto Von Mises es Lew Rockwell y para obtener información sobre el seminario, su catalogo de libros y otras actividades pueden escribir a: The Ludwig Von Mises Institute, Auburn University, Auburn AL 36849.”

¿Y cómo yo decido ir a un seminario en marzo que empieza en julio cuando el trámite es imposible se completara en tres meses usando el correo público?  Duda razonable, pero ya emprendedores estaban tapando otro de los huecos que son parte de la naturaleza de empresas públicas.  Los couriers ya estaban en la actividad de poner a los desamparados dominicanos en contacto con el mundo exterior vía transporte rápido y seguro de correspondencia. El servicio era buenísimo y sus excesos o “deja ver si paso ésta” se fueron limitando con las quejas de los consumidores y la competencia.  Creo que todavía recuerdan la tarde que me aparecí con un insólito y enorme catálogo de 1,200 páginas con ofertas para la calefacción de hogares y negocios.  Raisa me lo había entregado media hora antes con la sentencia “el Doctor dio órdenes que todo lo que es correo personal se descuente de nómina”.

Pero la gran ventaja hoy es conseguir en el portal web del Mises una biblioteca digital gratis con libros se descargan en pdf, videos de todos sus eventos, revistas especializadas y boletines diarios de noticias y comentarios.  WWW.mises.org es un tesoro de información donde lo único que no le regalan es el tiempo debe invertir usted en conocer otro punto de vista y comparar. Y la barrera del idioma ya no existe, porque en el mismo portal tiene la opción de ver todo el contenido en español.

En varios países se están formando centros similares. En España está el Centro Mises Hispano, con quienes colaboré en la traducción de algunos artículos y subtitular videos hace unos años, también con recursos educativos impresionantes. En Brasil, Canadá, Venezuela, Cuba, Chile y otros países también están presentes con portales web, cuentas redes sociales y otras vías de difusión de las ideas de los economistas de esta escuela inicia con Carl Menger y su contribución en la llamada Revolución Marginalista.  El Instituto Mises de EUA ve con agrado la expansión de estos centros, con los cuales no tiene una relación administrativa directa, y es común ver colaboradores y directivos de esos centros en sus eventos. Hace dos años estuvo una delegación de economistas libertarios venezolanos explicando el fracaso viven en carne propia de lo que Mises predijo para toda sociedad que organiza su economía sin propiedad privada, precios, empresario en competencia y mercados libres.

El Instituto se mantiene totalmente de donaciones privadas. No acepta fondos provenientes de gobiernos estatales o del gobierno federal. De los privados luce que hacen su debida diligencia para aceptar las de empresarios en que ven genuino interés en el avance de las ideas promueve el instituto. De igual modo parece que ha funcionado su estrategia de depender de una base amplia de donantes. Eso es importante en una entidad que no hace concesiones.

Para el Instituto Mises la competencia no es negociable. No puede ser buena para lo que compro y mala para lo que vendo. Los acuerdos de libre comercio, como escuché a Lew Rockwell cuando estuve la primera vez en la Semana Mises de 1990, son de esa naturaleza si se escriben en una página: un artículo que prohíba totalmente la imposición de aranceles al comercio de bienes y el resto de la página para estampar las firmas.  Luego de la conferencia hablé con él unos minutos, le empecé hablar de los beneficios de las zonas francas para el país y las iniciativas de EUA para favorecer países caribeños. Me cortó en seco: salgan de todos esos acuerdos y conviertan al país entero en una zona de libre comercio unilateral.

Así se han mantenido y les ha ido bien como un centro para difundir ideas y juntar libertarios de todo el mundo en eventos que son el origen de amistades duraderas que acostumbran a regalar libros. Al igual que Jaime Álvarez, Thomas Jacob un amigo suizo que conocí en el evento de 1990 siempre me traía varios cuando visitaba mucho República Dominicana, especialmente los de Hans Herman-Hoppe un brillante economista que estuvo varios años junto a Murray Rothbard en la Universidad de Nevada. El Dr. Hoppe y Thomas han sido grandes amigos desde que se conocieron también ese año. Thomas colabora con los trabajos de la entidad Property and Freedom Society del Dr. Hoppe, quien creo le confirmó la asistencia al cumpleaños número seis cero del alegre y simpático libertario suizo. ¡Feliz fiesta, buen amigo!