El presidente Danilo Medina glorificó el crecimiento económico del país como un logro propio en su reciente discurso de rendición de cuentas. Ahora bien, analicemos este supuesto logro de forma objetiva. El crecimiento económico en la República Dominicana en parte es Real, el mito está y la mentira está en quien tiene la responsabilidad y el crédito de ese crecimiento debido a que ese crecimiento se genera en contra de la voluntad del Estado y de este gobierno. ¿A qué nos referimos? A que se genera en el gran libre mercado clandestino que hay, es decir, en el gran sector informal que ha estado en plena expansión (58.2% de la economía) mientras que la formalidad está en contracción tal como demuestra la evidencia empírica y el gráfico.
Respecto a este hecho, el gobierno simplemente no se atreve a meterse con el sector informal porque piensa que políticamente le puede hacer daño. Dado a que nuestro sector informal no paga los enormes impuestos ni sigue las gigantescas regulaciones, el mismo acumula ahorro y crece, estando en un espacio de libre mercado solamente que en una situación clandestina donde no tiene acceso financiero, y sin protección legal, con lo cual pudiera crecer hasta más. Por lo tanto, la solución es obvia, convertir el sector informal más parecido al sector formal incentivado con exención de impuestos como zona franca y turismo, es decir, bajar enormemente las tasas de impuestos a las empresas como proponemos que actualmente tributan en totalidad un 49% sobre sus ganancias (Informe Doing Business) para que los informales, que quieren tener acceso a financiamiento bancario y quieren tener protección legal se Incluyan en el mercado formal y paguen tasas de impuestos bajas que les permitan crecer, expandir y emplear en vez de aplastarlos como les sucede a las pymes formalizadas donde 9 de cada 10 quiebran actualmente (Estudio de ANJE). Hay que comprender que nadie delinque (estar en la informalidad) y arriesga todo hasta su propia libertad pudiendo ser encarcelado porque si, lo hacen porque la formalidad actualmente es inviable y no tienen de otra. Esta situación, gracias a los enormes impuestos y regulaciones, a su vez garantiza un mercado con más oligopolios y empresas enormes donde solo sobreviven los grandes quedándose artificialmente con una mayor parte del mercado lo cual no fuera posible bajo un mercado natural y libre con bajos impuestos y regulaciones.
La segunda razón del crecimiento es falsa, artificial y temporal, ya que se debe a la parte del crecimiento que deriva del endeudamiento. Procedemos a explicar. Si te vas de viaje y explotas tu tarjeta de crédito, durante el viaje tendrás abundancia y la pasarás fenomenal pero cuando regreses al país y te des cuenta de que destruiste todo tu capital y ahorro, vendrá la miseria. De esa misma forma, cuando se acabe la capacidad de pago del Estado dominicano, donde actualmente ya comprometemos un 25% de nuestros ingresos fiscales solamente al pago de los intereses de la deuda, y se nos acabe el financiamiento voluntario y terminemos en el FMI, explotará la burbuja de la parte artificial del crecimiento por el endeudamiento causando una recesión proporcional al tamaño de esta burbuja (que no es la única, está la cambiaria). Hecho que, por cierto, es lo que produce desconfianza en el peso dominicano causando que todos nosotros (el mercado) y los agentes económicos deseemos ostentar otras divisas como el dólar de manera que la demanda del peso cae frente al dólar que se visualiza en una subida del dólar, pero no es que el dólar sube en sí, sino que es la demanda del peso que se derrumba. La tercera razón consiste en las remesas que no es en lo absoluto un producto del estado dominicano, ni siquiera el estado americano, sino que son los privados dominicanos en el exterior con lo cual la CEPAL certifica que sin las remesas la pobreza estaría en un 61%, y así tiene las agallas el señor presidente de clamar que ellos han logrado un crecimiento económico del 5.1%, que han reducido la pobreza a 20.6% y el índice de Gini a 0.431, que descaro.
Por otro lado, aunque hay una parte del crecimiento real que se debe a que el gobierno ha mantenido de forma casi forzada (ya que han intentado eliminarlo sin éxito) los sectores formales incentivados con exenciones de impuestos como zona francas y turismo, que a la vez generan crecimiento de forma colateral a los sectores formales de construcción y servicios, no es menos cierto que la destrucción de oportunidad de crecimiento real en el resto del sector formal aplastado a impuestos sin incentivos es abrumadora y mayor a tal grado que el 90% de pymes formalizadas quiebran y que la formalidad se contrae en relación a la informalidad durante la gran mayoría del tiempo de la última década y en donde si en algún momento esa tendencia se suspende con el mismo nivel de crecimiento, exhortamos a que revisen el nivel del incremento en el endeudamiento con lo cual se estaría creciendo con un proporción artificial mayor. Por último, la actividad económica oscura y el lavado del narcotráfico casi impune también es un factor, sin embargo, no se debe opinar mucho al respecto debido a la falta de estadísticas e informaciones confiables. En conclusión, una parte del crecimiento es artificial en base a deuda, la parte que es real no es crédito del gobierno como la informalidad y las remesas, y otra parte que puede ser real es ilegal como la generada por el narcotráfico impune.