Dada la situación global, desde marzo del 2020 inició la cuarentena con medidas para controlar la propagación del COVID-19. Este problema logró cerrar miles de negocios, generó pérdida de empleos y otros daños económicos. Esto hizo surgir un sin número de ataques de ciberdelincuentes aprovechando esta crisis económica global y la mayor dependencia de las redes de internet. Los ataques de Ransomware se propagan cada vez mas y ataques de día cero surgen con mas frecuencia. La migración de trabajo presencial a virtual ha creado otras brechas de seguridad que antes no existían. El tiempo que se debió de haber realizado esta migración fue corto, permitiendo que se pasara por alto el área de seguridad de la información dado que el modo de operar de la empresa no podía tener retrasos.
Los ciberdelincuentes andan ahora haciendo ataques mucho mas sofisticados ya que entre ellos mismo están compitiendo por ver quién logra comprometer X empresa. Esto ocurre por el simple hecho que pudieran vender una conexión reversa al mejor precio. Aunque no solamente puede ser una conexión reversa, sino que puede ser un ataque del infame Ransomware. Además, otros dedican tiempo para encontrar vulnerabilidades en tecnologías comunes y servicios de sistema operativo (ej. El compartir archivo entre una computadora en Windows (SMB)). También, un ciberdelincuente puede aprovechar este momento por configuraciones por defecto o incorrectas de los servicios, aplicaciones web u otras tecnologías expuestas al Internet. Estos problemas de configuraciones ocurren mas frecuentemente por el simple hecho de que todo debía pasar a producción ayer. La prisa de propia de estos tiempos en servicios virtuales.
Debemos prepararnos para este nuevo año a nivel de ciberseguridad por el simple hecho que mientras más compleja está la crisis económica más ataques cibernéticos pueden ocurrir. También, tenemos que entender que no todos están atacando por dinero, pues hay quienes realizan ataques en busca de fama y otros motivos sociales. Por ende, debemos trabajar mas de la mano con el departamento de seguridad de la información para poder asegurar que existan las mejores prácticas al momento de desarrollar, configurar y migrar X tecnología. En otras palabras, el departamento de seguridad de la información debe tener una mayor responsabilidad en el área de tecnología y a la vez integrarse a los otros departamentos para asegurar que las políticas de la empresas se encuentran al día y que se esté implementando de manera correcta.