Por primera vez en nuestra lucha electoral, la candidatura vicepresidencial será fundamental para el triunfo o el fracaso de los dos grandes contendientes, y por razones diferentes.En el caso del PLD, la candidatura de Margarita Cedeño es fundamental, porque entre otras cosas viene a sellar la unificación de esa organización en torno a su candidato Danilo Medina. (Es cosa de manuales: En toda campana electoral, un partido unido es un requisito imprescindible. )
Para Hipólito Mejía el asunto de la candidatura vicepresidencial es igual de importante, pero peor; no se debe olvidar que el triunfo de Mejía sobre Miguel Vargas fue determinado -entre otras razones- por el aporte entre 8 y 12 por ciento de Luis Abinader a su candidatura, al módico precio de la nominación vicepresidencial, que sería su trampolín político hacia la candidatura presidencial de 2016. Y eso no puede aceptarlo un Miguel Vargas, que si bien fue derrotado, obtuvo un importante 47 por ciento, y además controla la dirección del partido.
Con la oposición (disimulada o no) de la dirección de su partido, un candidato no puede ganar unas elecciones presidenciales aunque se llame Hipólito Mejía y tenga raíces banilejas, lo que es un lujo.
Ahora que comienzan a cambiar los números y las percepciones, y la próxima Gallup-HOY podría confirmar la recuperación de la ahora oficial candidatura de Danilo, digamos que en el PRD Miguel Vargas tiene la llave, no "de tu corazón", que es un atinado verso de Juan Luis, sino de la necesaria imagen de unidad que un partido requiere para ganar unas elecciones. En política electoral, la percepción es la realidad si puede definir el voto, como lo define. He ahí el drama vicepresidencial de Hipólito Mejía.
Margarita unifica la candidatura del PLD, mientras Abinader divide la del PRD. Pero, ¡vaya vaina!, resulta que uno de los basamentos/valores en los que se apoya la candidatura de Hipólito es su condición de hombre de palabra, leal y amigo de los amigos. Ay, de la "insoportable levedad del ser" y sus dilemas.
En el PRD, los resultados de la próxima encuesta Gallup-HOY podrían decidir sustituciones o permanencias. Ya veremos.