De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, actualmente "estamos en una fase de epidemia con múltiples focos". La directora del departamento de preparación mundial para los riesgos de infección de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Sylvie Briand, explicó este martes (04.02.2020) a periodistas que el término de "pandemia" se aplica cuando una enfermedad se propaga a nivel mundial. Sin embargo, insistió que este aún no es el caso del nuevo coronavirus, que ha dejado más de 400 muertos en China y se ha propagado a unos 20 países.

Sin ánimo de ser pesimista, las autoridades dominicanas están obligadas a tomar medidas extremas en cuanto a la salud y a una ineludible crisis económica que se nos avecina, porque como todos sabemos nuestra economía es extremadamente dependiente de la industria turística y no hay dudas de que la Industria Turística Mundial comenzará a tener una merma significativa o quizás una parálisis total, producto de la amenaza de una epidemia con matices de convertirse en pandemia.

En los últimos días, en República Dominicana se han registrado viajeros que se han tenido que colocar en cuarentena por sospecha de haber contraído el virus y/o por su procedencia; igualmente recibimos un crucero repleto de turistas, en el que algunos ocupantes presentaban síntomas similares a los del coronavirus y aunque se descartó que se tratara de ese virus, nuestras autoridades de Salud y las de Turismo tendrán que evaluar cual de los riesgos van a asumir, porque ante esta amenaza mundial, seguir recibiendo turistas de todo el mundo representa una amenaza a la salud de toda la población dominicana y detener el flujo de turistas representaría entrar en una crisis económica en la que se perderían miles de empleos y se perdería la estabilidad cambiaria y financiera del país.

Pero, independientemente de la decisión de nuestras autoridades, tenemos que prepararnos lo mejor posible para que más temprano que tarde recibiremos una significativa merma del turismo ante las prevenciones de los propios turistas y posibles recomendaciones de organismos de salud de sus respectivos países o de la propia Organización Mundial de la Salud (OMS).

Es posible, que valga más la pena hacer una cuarentena para evitar el contagio, a esperar que nos impongan una cuarentena para evitar la propagación.

A nadie le caben dudas del derroche de recursos por parte de nuestras autoridades, con miras a ganar la simpatía de los electores, sin embargo, ante esta potencial crisis de salud y potencial crisis económica, se requiere de un gobierno que se desvincule de la campaña electoral y se ocupe exclusivamente de gobernar y administrar la cosa pública, antes de que sea demasiado tarde.