Hace pocas semanas fuimos sorprendidos con la pretensión de algunas clínicas privadas (Prestadoras de Servicios de Salud) de elevar  los cobros a los pacientes  afiliados al régimen contributivo del Seguro Familiar de Salud, por montos que podrían llegar hasta un 30%.

Ante este exabrupto que rompía  unilateralmente los contratos firmados entre las ARS y estas PSS, registrados ante la SISALRIL, todas las ARS guardaron un silencio cómplice que a muchos hizo pensar que se trataba de un complot del cual formaban parte, dirigido a presionar al CNSS por la elevación del per cápita que mensualmente reciben las aseguradoras. Solamente SENASA defendió los derechos de sus afiliados, negándose a aceptar elevación unilateral de cobros a los pacientes.

El CNSS produjo entonces  un acuerdo en el cual se solicitaba a la SISALRIL  garantizar el cumplimiento de los contratos que defienden los derechos de los afiliados. Cuando  toda la ciudadanía enterada esperaba que la SISALRIL, en cumplimiento de sus responsabilidades legales y reglamentarias, aplicara el Reglamento de Infracciones y Sanciones del Seguro Familiar de Salud, increíblemente  produce una comunicación escrita al CNSS en la cual declara su incapacidad de hacer nada al respecto.

Sorprende mucho esta actitud pasiva ante tan graves violaciones a la institucionalidad del sistema, en un organismo que ha sido tan prestamente diligente en amenazar con sanciones para que no se mejore las prestaciones a los afiliados aumentar las prestaciones a sus afiliados.

Reconocemos y respaldamos estas buenas decisiones del CNSS y esperamos continúe los esfuerzos para restablecer la institucionalidad en beneficio de la ciudadanía

En su última sesión, del pasado miércoles 6 de julio, el CNSS  adoptó una resolución de gran trascendencia para el desarrollo del Sistema  Dominicano de Seguridad Social, en la cual se ordena a la SISALRIL aplicar el mencionado Reglamento, en su artículo 6, y sancionar a las PSS que unilateralmente violaron los contratos en perjuicio de los beneficiarios.

En la práctica esto significa enmendar la plana a la SISALRIL por incumplimiento de sus responsabilidades, y restablecer  la institucionalidad, violentada por  algunas PSS, las ARS lucrativas y dicha Superintendencia.

Pero el CNSS no se limitó a lo anterior. Decidió revisar el Reglamento de Infracciones y Sanciones, con la intención de adecuarlo a las nuevas realidades, y designó una Comisión que velará por el desarrollo del primer nivel de atención, el establecimiento de protocolos para la atención integral de los problemas prioritarios de salud en los diferentes niveles del sistema de salud (público y privado), además de  apoyar el desarrollo de la Red Pública de Servicios de Salud.

De esta forma, el CNSS parece haber evitado la maniobra que pretendía una nueva elevación del per cápita, con lo cual el régimen contributivo iría a la quiebra,  o se forzaría al Congreso a elevar las cotizaciones de los empleados y empleadores, por cuanto los egresos serían mayores que los ingresos.

Más aun, considerando que estas decisiones han sido adoptadas por consenso de todos sus integrantes,  y considerando antecedentes recientes de otras Resoluciones, el CNSS  parecería decidido  a restablecer la institucionalidad tan vapuleada por la “cartelización” de algunos de los principales actores del sistema, y por la debilidad de la SISALRIL en el cumplimiento de sus responsabilidades de velar por los derechos de los afiliados.

Reconocemos y respaldamos estas buenas decisiones del CNSS y esperamos continúe los esfuerzos para restablecer la institucionalidad en beneficio de la ciudadanía.