David juró por su pequeña hija para que le crean que él no le ha pedido nada a Luis ni a nadie. ¨Que sólo lo hizo movido por la fuerte convicción de dejar en el camino las buenas prácticas de la alternabilidad del poder (…) ¨.
El camino de David desde la primera vez que incursionó en política lo hizo como diputado al Congreso Nacional de la República Dominicana, y de la Silla que representó dignamente la curul, dejó claro que para hacer una buena gestión pública no es necesario repetir en el cargo.
Como una constante –invariable- en su formación de político, así lo hizo con la fuerza de un jinete relacionado a las generaciones milénica y centúrica que vienen decididos a romper con viejos paradigmas de políticos que se creen imprescindibles en la sociedad.
En tal sentido el alcalde de la primera ciudad del nuevo mundo David Collado, no quiso repetir en sus funciones para ser la representación legítima de los jóvenes segmentados en las clases anteriormente mencionada, y algo más: marcando en las encuestas más de 70% de favorabilidad y aprobación, decidió seguir a Machado: «haciendo camino al andar».
Entonces, queda claro que si se puede alcanzar con la vista [una cosa] ¿qué necesidad imperiosa hay de jurar por lo más sagrado para que alguien crea lo que está a la vista?
[…] a veces ¨el juramento¨ viene como un bálsamo para calmar el picor de lenguas viperinas o dándoles respuestas a imágenes que salen de la nada. Hologramas que aparecen graficando panteras que se forman del morbo de la antigua Roma ¨de no querer respetar la alternabilidad en el poder¨.
En qué la peor de las pesadillas esté asomándose por los predios o por las esquinas del Partido Revolucionario Moderno o de las mentes de hombres y mujeres influyentes la idea de seguir más allá a la alternabilidad o de modificar la Constitución para darle paso al continuismo.
Y, suponiendo que el PRM gane las elecciones presidencial del 17 de mayo: ¿Qué pasaría si sigue el murmullo y rocorroco invasivo de pecho en los pasillos del fantasma de la reelección para las elecciones del año 2024?
De pronto les sugiero al PRM: «la nueva cultura de alternabilidad en el poder dentro de los procesos democráticos según Peña Gómez, exige que se le de paso a la generación con talento, que se aproxima a gran velocidad en el camino para provocar los cambios que amerita cada generación dentro del espectro. (En este caso, a los potenciales candidatos presidenciales dentro del PRM que esperan un turno al bate en el home play para las elecciones del año 2024).
Mientras tanto y en todos los sentidos, la señal en el camino que envía David Collado (de no reelección) es correcta, lógica y garantiza la unidad dentro del partido. Sin embargo el empecinamiento o tozudez de los líderes en posición de poder, coloca en gran riesgo el futuro democrático del partido; ya que cuando una organización política decide transitar el camino de la ambición, el desenfreno, la arrogancia y de las apetencias personales, como lo hicieron otros partidos [tradicionales], su final es el resquebrajamiento y la indigencia partidaria.