En ocasión del “Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer”, nos cansamos de ver en medios de comunicación y redes sociales, anuncios, publicidad, tanto de instituciones públicas como privadas, frases como:
“Dile no a la violencia” … “No te dejes” … “Denúncialo” …, etc.
Y es que desde una cabina de grabación, cámaras, luces y acción, para salir en los medios es muy fácil opinar pero, la realidad de estas mujeres abusadas es totalmente ajena a lo planteados y me atrevo a decir que hasta cierto punto dañina, ya que le pueden crear falsas expectativas o que sus aspiraciones al llegar donde se debería hacer justicia se vean frustradas, por la falta de mecanismos efectivos dentro de la sociedad y del sistema de derecho.
Una vez hecha la denuncia en contra del agresor, ¿qué es lo que le espera?, una orden de alejamiento que no es más que un papel, muchas veces mal redactado, una psicóloga haciendo innumerables preguntas a una mujer que lo que necesita es que la protejan y sentirse segura, una cita para que asista el agresor y la victima, para uno o dos meses, esto entre otras que suceden en estas instituciones, que en ocasiones son los verdaderos verdugos de las víctimas, por no darle una asistencia efectiva a sus reclamos.
Ley 24-97, Sobre Violencia Intrafamiliar, en su articulo 309-1 dice lo siguiente: “constituye violencia contra la mujer, toda acción o conducta pública o privada, en razón de su género que causa daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, mediante el empleo de fuerza física o violencia psicológica, verbal, intimidación o persecución”.
Hasta ahí todo suena muy bonito y conmovedor, pero en la práctica lo que se necesita es que una parte de esos fondos de publicidad sean utilizados para la implementación de abogados de oficio dentro de las instalaciones de violencia de genero para dar asistencia, orientación y sobre todo seguimiento a los casos que allí se presenten, debido a la gran cantidad de víctimas reportadas en los últimos años, especialmente en este último mes, casi una víctima por día.
Ya que una vez la victima hace la denuncia se encuentra en un mayor riesgo de que el agresor actué en su contra. La mayoría de estas mujeres no cuentan con los recursos económicos para pagar un abogado, si el Estado no les proporciona de manera gratuita este servicio y se le da el debido seguimiento en materia judicial, y alojamiento provisional según el caso, estos feminicidios lamentablemente seguirán en aumento, y los homicidios al igual, ya que estos cobardes prefieren quitarse la vida antes de enfrentar a la justicia, y más niños quedan huérfanos.
Hago un llamado a las autoridades correspondientes de que consideren esta propuesta. Las verdaderas mariposas deben volar en un ambiente de armonía y seguridad.