La Feria Internacional del Libro
Ayer 20 de abril, sin duda alguna, es un hito en la lucha social de los dominicanos por el cumplimiento de la Ley 66-97 (promulgada hace 15 años y reiteradamente incumplida por éste y el gobierno del PRD), porque finalmente la Coalición por una Educación Digna instaló su pabellón en la Feria Internacional del Libro. Hecho que podría pasar desapercibido por muchos, pero no para quienes han luchado arduamente por conseguir la construcción de un sistema educativo que iguale las oportunidades de preparación a la nueva generación de dominicanos.
Este hecho reviste un simbolismo único, ya que el Presidente Leonel Fernández obstinadamente, ignoró y despreció este movimiento, hasta el punto de convertirlo en su principal rival sociopolítico. En repetidas ocasiones, activistas, periodistas y simples ciudadanos fueron maltratados por las fuerzas de seguridad y partidarios del presidente, como si se tratase de una actividad subversiva, chocando esta terquedad y obstinación con lo absurdo, por el solo hecho de llevar un distintivo de esta lucha.
La soberbia presidencial apabulló por con el poder absoluto del ejecutivo, legislativo y judicial las sombrillas amarillas, pero fue insuficiente para contener el ímpetu de la fuerza de una justa y legítima exigencia social. El 4% del PIB para la educación, no es un capricho grupal, es una lucha que viene desde finales de los 80, plasmada en el Primer Plan Decenal por la Educación, por un hermoso ejercicio de consenso nacional, que paradójicamente fue reivindicado posteriormente con la promulgación del la Ley 66-97 por el mismo Fernandez a principios de su primer mandato.
En los últimos dos años, las sombrillas amarillas concitaron las simpatías de diversos y distintos grupos sociales de dominicanos, por una causa común: mejorar la calidad de la educación pública dominicana con un mínimo de inversión necesaria, el 4% del PIB, que aunque dista por estar debajo del promedio de la región, es suficiente para comenzar esta transformación. Razón por la cual, de manera espontánea cientos de organizaciones firmaron a finales del año pasado el Compromiso Político y Social por la Educación con todos los candidatos presidenciales de la actual contienda electoral. Compromiso que magistralmente obtuvo de todos los aspirantes presidenciales, una participación sin precedentes con planes, debates y foros sobre sus propuestas, que aun se respiran en el ambiente electoral; enriqueciendo y creando un verdadero proyecto educativo.
La toma de la sombrilla amarilla de la Feria Internacional del Libro, es una invitación a todos los dominicanos de todo sexo, credo, raza, clase e ideologías social, para colaborar en la conformación de un sistema educativo que llegue a ser la mejor herramienta de disminución de pobreza y desigualdad social en la República Dominicana, renovando nuestra fe y orgullo por llegar a ser ejemplo para mundo.
Esta lucha será el modelo de reclamo a seguir contra la corrupción, el clientelismo, la falta de institucionalidad, de salud, de seguridad, de justicia y de derechos ciudadanos. El camino es largo, pero entre todos podemos construir la patria que Duarte soñó: la indómita y brava que altiva su frente alzará.