Ejercitarse luego de mucho tiempo de llevar una vida sedentaria  puede significar un verdadero reto para  las personas que desean hacer un cambio en su estilo de vida y alcanzar un buen estado de salud. Cada día las enfermedades cardiovasculares avanzan y hacen presa a poblaciones cada vez más jóvenes quienes cada vez son más sedentarios y más obesos.

Conseguir hacer ejercicios  de manera regular y efectiva en consonancia con una dieta saludable puede hacer una diferencia significativa en la salud general y  evitar enfermedades como el Síndrome Metabólico, Diabetes mellitus , Hipertensión Arterial  y  otro gran número de enfermedades.

Para lograr obtener buenos resultados en los planes de ejercitarse luego de mucho tiempo de haberlo hecho, o nunca  haberlo hecho del todo, es muy recomendable hacerse una evaluación cardiovascular que incluya una prueba de esfuerzo, analíticas generales, colocación de un Holter por 24 horas, y por supuesto un buen examen físico para estadificar su condición física y su estado de salud de base.

Es muy recomendable la adquisición de un reloj medidor de la frecuencia cardiaca para así controlar el límite de las pulsaciones cardiacas por minuto tratando siempre de mantener la frecuencia de las pulsaciones entre un 55% y un 85% de las pulsaciones cardiacas máximas que pueda alcanzar el paciente según su edad y su gasto metabólico, en el caso de que el paciente sea hipertenso y diabético se recomienda tomas de la tensión arterial , frecuencia de pulso  y de glicemia antes y después del ejercicio y llevar un registro de estos valores.

La Asociación Americana del Corazón recomienda  ejercitarse al menos 30 minutos diariamente o al menos 3 veces por semana  a una intensidad moderada aunque debe tomar en cuenta comenzar a un nivel que sea tolerable para usted e ir aumentando conforme a su percepción del esfuerzo realizado, también se considera como validos ejercitarse en periodos de 10 minutos 3 veces al día a esta intensidad en personas que se le imposibilite lograr este  tiempo.

En la medida de lo posible se debe incluir en la rutina los ejercicios de estiramientos para evitar lesiones y una rutina de fortalecimiento de los grandes grupos musculares.

Aumentar la capacidad de actividad física con el ejercicio puede significar un paso importante en la consecución de beneficios altamente positivos para el resto de la vida y obtener  una mejor autoimagen, una mejor vida sexual, un mejor estado de ánimo, un control de sus niveles de triglicéridos, aumentar su colesterol bueno (HDL) y controlar sus valores de glicemia en sangre.

De no sentirse capacitado para lograr hacer este cambio por usted mismo, es recomendable siempre buscar una ayuda experta de un MEDICO, se debe recordar siempre  que el ejercicio puede ser una efectiva medicina para múltiples enfermedades pero a la vez puede ser altamente peligroso para su salud, por tal motivo debe ser prescrito  con  criterio de profesionales calificados.