La fascinación humana por tratar ciertos aspectos o modos del ser que aún no han sido resueltos con respecto a su origen y la forma en que inciden en la vida, han librado las fronteras creativas por tener la libertad de transitar en varios sentidos; valiéndose del alto contraste teatral de la realidad hasta resonar con la inquietante línea que nos separa de lo mágico.
Durante toda la maquetación del mundo mitológico, el auto-encantamiento aporta al rigor de las ideas y a la estimulación de las transformaciones en la inventiva humana como ejercicio de existencia. Del mismo modo, pensar en el arte como proceso, implica también el esmero para conseguir los elementos lúdicos suficientes hasta lograr establecer un lenguaje y una narrativa que puedan provocar al espectador.
Bajo esa urgencia creativa coinciden Breilin Montero y Luis Santana, con sus propios hallazgos, dotados de un evidente embrujo que une al hombre con lo natural e inherente de su ser, una mezcla deliberada a la cual han denominado “Dualidad 11-11”.
Breilin Montero, graduado de Artes Visuales de la Escuela Nacional de Artes Visuales (ENAV), y en Bellas Artes de Altos de Chavón La Escuela de Diseño; trasluce la reconstrucción de un mundo personal, que remite a actos sensibles cargados de memorias, cohesionando elementos cotidianos con un alto sentido de suspicacia para invitar a la reflexión sobre la manera de ver lo que somos. La intimidad que creemos guardar y que llevamos con viva esencia.
Luis Santana, graduado de Artes Visuales de la Escuela Nacional de Artes Visuales (ENAV), además de Publicidad mención Diseño Gráfico en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD); aplica diversas experiencias plasmando un grafismo lleno de texturas – a veces geométricas- que conectan lo irreal con lo ordinario; un perfil dominador que evoca el misterio implícito en la configuración del hábitat natural y sus componentes.
“Dualidad 11-11” se enmarca dentro de las nuevas posibilidades del arte contemporáneo dominicano. Es una atmósfera que contiene distintas fuerzas y simbolismos, donde lo figurativo se establece con un movimiento que inevitablemente busca salir del espacio físico humano y adquiere otras formulaciones del “YO” y sus diferentes niveles de materialidad.
La muestra forma parte de las iniciativas del Hotel Crowne Plaza para la promoción del arte y la cultura dominicana, y presenta en sus galerías 12 piezas con las que Breilin y Luis, demuestran su capacidad de interactuar en un esquema de complicidad en la construcción y ejecución de las ideas.