Ejerció la profesión de abogado en su ciudad natal de Puerto Plata. Es antológica la defensa que hizo en el caso de Rafael del Valle Córdova.
Pronunció conferencias y charlas en la ciudad de Puerto Plata, en la Sociedad Cultural Renovación de Puerto Plata, de la cual fue Presidente.
El 7 de mayo de 1928, fue fundada en Puerto Plata la “Sociedad Cultural Renovación”, siendo su padre uno de sus fundadores de esa organización cultural. (27)
Durante su mandato en dicha institución se fundó una Escuela de Idiomas; reorganizó y enriqueció con nuevos libros a la biblioteca, bajo la dirección de José Gilbert Suero (28) y también consiguió el local a través del Ayuntamiento Municipal, que era propiedad del periódico Ecos del Norte, donde funciona actualmente ésta, en la calle Duarte esquina calle Imbert, de Puerto Plata, bajo la dirección actual de doña Lillian Russo de Cueto.
Es digno de mencionar el discurso que pronunció el día de la inauguración de la avenida Virginia Elena Ortea, donde puso de manifiesto sus condiciones excepcionales de orador y cultivador de la prosa, haciendo un excelente perfil biográfico de la poetisa y prosista homenajeada.
Fue Juez de Paz y de Primera Instancia en varios tribunales del país, poniendo de manifiesto su honorabilidad, honradez, seriedad y equidad.
Escribió varios artículos defendiendo al gobierno del dictador Trujillo, como fueron: “El sentido económico del presidente Trujillo” (29); “El personalismo de la vieja política” (30), y otros…
Su carrera de ascenso continuó durante la dictadura de Trujillo, entrando al servicio diplomático.
Mediante el decreto número 3041, de fecha 13 de octubre de 1945, fue designado por el Poder Ejecutivo como Cónsul de la República en Chicago, Estados Unidos de América.
De esa posición diplomática, fue traslado a Primer Secretario de la Embajada de la República en los Estados Unidos de América, por el decreto número 3688, de fecha 26 de julio de 1946.
En fecha 3 de marzo de 1947, por el decreto número 4216, se nombró al doctor Sebastián Rodríguez Lora, Primer Secretario de la Embajada de la República en los Estados Unidos de América, queda nombrado Representante de la República ante la Junta y ante el Bureau Panamericano del Café, en lugar del señor Mario E. de Moya.
Por decreto No. 4325, de fecha 8 de mayo de 1947, se nombraron a los señores doctor Sebastián Rodríguez Lora y Manuel Emilio Nanita, Primer Secretario de la Embajada de la República en los Estados Unidos de América y Director General de Comunicaciones, respectivamente, para integrar la Delegación del Gobierno de la República Dominicana ante las Conferencias Internacionales de Radiocomunicaciones, de Radiodifusión de Ondas Cortas, y de Plenipotenciarios para la revisión de la Convención de Telecomunicaciones de Madrid de 1932, que tendría lugar en Atlantic City, New Jersey, Estados Unidos de América, a partir del 15 de mayo de 1947. El Dr. Rodríguez Lora, presidió dicha Delegación.
En fecha 3 de junio de 1948, mediante el decreto No. 5162, el Dr. Sebastián Rodríguez Lora, fue nombrado Consultor Jurídico del Consulado General de la República en New York y doctor José E. Aybar, Cónsul General de San Francisco, California, quedan nombrados Delegados Gubernamentales de la República Dominicana en la 31ª. Reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo que se celebrará a partir del 17 de junio de 1948, en San Francisco, California.
Fue designado Ministro Consejero de la Embajada de la República en Washington, Estados Unidos de América por el decreto No. 6088, de fecha 17 de octubre de 1949.
De ahí fue nombrado como Primer Secretario de la República en Puerto Príncipe, Haití.
Las simpatías políticas del Presidente de Haití, Dumorsais Estimé se inclinaron por el triángulo democrático constituido por Cuba, Guatemala y Venezuela, las cuales adversaban al gobierno tiránico de Rafael Trujillo; en el desenvolvimiento de la situación creado el comandante de la zona militar de Cabo Haitiano, Coronel Antrol Roland, que estaba en la inteligencia con el dictador dominicano, fue descubierto su compromiso y se trasladó a Santo Domingo, desde donde hacía unas alocuciones dirigidas a su patria en cróele y clave; como consecuencia de las investigaciones de aquel gobierno, se estableció que Bibin Dupuy, boticario de Puerto Príncipe era el principal conspirador de ese régimen y agente carnal de Roland, por cuyo motivo, se ordenó su arresto, el cual se resistió recibiendo la muerte.
Notas
27. Sus demás fundadores fueron: José del Carmen Ariza, su primer presidente, Alonso Rodríguez Demorizi, Amiro Pérez Torres, Julio Arzeno, Rufino Martínez, Rodolfo Bentz, Manuel Calderón H., Ricardo Capestany, José R. Carrau, Charles Chaig, Pedro E. Carrau, Pedro Cortiñas, Lic. L. Durán de la Concha, José E. Gilbert Suero, Rafael Fondeur, Ansel Hart, Anselmo Henríquez, Lic. Heriberto Herrera, G. Ernesto Jiménez, José Kinsley, Adolfo Pérez Torres hijo, Jaime A. Lockwardt, Justiniano Martínez, Manuel de Jesús Mathieu, Luis Ortíz Arzeno, José Pierret, Lic. F. Eugenio Polanco, José Reyes Santiago, Leopoldo Reyes hijo, José María Rodríguez Arresón, Arturo Santiago Gómez, Antonio Torres, Pedro P. Villanueva y Dr. Rafael R. Vásquez Paredes. Al quedar fundada dicha sociedad, sus fundadores se preocuparon en instalar una biblioteca que contribuyera a elevar el acervo cultural del pueblo de Puerto Plata. De la misma estaba encargado José Gilbert. Dicha institución aún continúa abierta al público, dirigida por la señora Lilliam Russo de Cueto y realiza todos los años un Concurso Literario Anual, en la categoría para adultos en ensayo, le dan el nombre de Rufino Martínez al premio.
28. Era hermano de Gregorio Urbano Gilbert Suero.
29. Listín Diario, Santo Domingo, 26 de julio de 1934.
30. Listín Diario, 2 de agosto de 1934.