En la semana pasada no pude publicar mi artículo porque me encontraba sin laptop hasta ayer, sin embargo no quiero dejar de presentar mi posición sobre la señora de Cotuí y el británico.

Después que su caso trascendió a los medios de comunicación y a raíz de todos los comentarios que se generaron en las redes sociales la mujer decidió hacer dos videos más en los que detallaba su situación. Según lo narrado por ella tiene dos hijas, no tiene casa propia y vive "arrimà" en una casa ajena y además tiene una discapacidad ya que no puede mover un brazo y está sin empleo.

A pesar de su discapacidad ella lava y plancha para mantener sus hijas. Definitivamente que su vida es un drama, una tragedia y ante una situación así ¿qué mujer no trataría de buscar una alternativa? Ella dice que estaba buscando un hombre que le ayude a mantener sus hijas y aquí entra el otro drama; una madre soltera donde aparentemente el padre está ausente de sus responsabilidades aunque ella nunca menciona al padre de las niñas. Conozco varios casos de mujeres sin empleo, con hijos por mantener y padres irresponsables.

A ella las cosas no le salieron bien, pero como ella hay muchas que también se dedican a eso y que quizás corrieron con mejor suerte. El hecho de que haya decidido llevar a los medios de comunicación un hecho tan bochornoso para ella es un indicativo de la desesperación en que se encuentra.

También trascendió que supuestamente el señor tenía muchos bienes y que la estaba probando, información que fue desmentida por la madre del señor en una entrevista que le hicieron en un medio digital internacional.

Yo culmino con una frase dicha por ella mismo en uno de sus vídeos "donde ella compró también venden". Su caso, en vez de generar burlas debe ser un ejemplo para las mujeres que se arriesgan en este tipo de aventuras.