Don Luis Fernando Souffront Torres fue el principal tronco genealógico de la familia Souffront—Almonte, de Puerto Plata.

Un ciudadano íntegro a carta cabal, humilde trabajador, serio, honesto y ejemplar. Este se ha ganado un lugar privilegiado en la historia de Puerto Plata.

Don Luis Fernando Souffront, inmigró de Puerto Rico a Puerto Plata por disgusto a una orden dada por el profesor en su Colegio, en el año 1904. Vino a Puerto Plata, porque estando en el colegio había en Puerto Rico una escasez de agua y el profesor le exigió a cada alumno que llevaran un galón de agua para mojar las huertas. Este se negó a cumplir tal decisión del profesor.

Al año de estar en Puerto Plata, vino a buscarlo su hermana Amelia Souffront Torres y no se quiso ir a Puerto Rico de nuevo. Permaneció en Puerto Plata viviendo hasta el día de su muerte.

Vino en barco a Puerto Plata a la casa de un familiar materno, el señor Adolfo Pérez Torres, padre del connotado jurista y notario, licenciado Amiro Pérez Torres.

Conformó una familia en Puerto Plata, que es respetada y admirada. Aunque no pudo formal académicamente a ninguno de sus hijos, debido a los exiguos recursos económicos de que disponía. Pero todos ellos fueron educados mínimamente e hicieron cursos técnicos. Sus hijos han sido ejemplos a imitar en las distintas actividades productivas que se han desempeñado y dedicado. Hablar de la familia Souffront en Puerto Plata es sinónimo de honestidad y trabajo continúo.

Algunos de ellos ligados al sector bancario, alcanzando altas posiciones de gerencias, como son Oscar y Mercedes Souffront Almonte, el primero fue Administrador en La Vega de la sucursal del Banco de Reservas de la República Dominicana y la segunda, fue gerente de Inversiones, Préstamos y Descuentos, S. A. (INPREDESA), en Puerto Plata. Otros, en el sector público y/o privado, como: José Souffront Almonte, fue Administrador de la Oficina Comercial de Santiago de la Corporación Dominicana de Electricidad (CDE), por muchos años, de ahí salió pensionado y actualmente es Administrador General del Consejo de Administración de la Nueva Editora La Información, C. por A., que edita el periódico santiaguero La Información, llevando al mismo a ser rentable y económicamente estable. Algunos de ellos inmigraron a Estados Unidos de América, en busca de nuevos horizontes como fueron: Elena, César, Rhina y Ariel Souffront Almonte, convirtiéndose éstos en ejemplos en aquel país.

A partir de la generación de los nietos y biznietos, éstos comenzaron a enviar sus hijos a estudiar a las universidades. Dentro de la familia Souffront, encontraremos profesionales, en: ingeniería civil, electromecánico, arquitecto, médico, odontólogo, economista, abogado, etc.

Luis Fernando Souffront Torres, nació en Las Marías, Puerto Rico el 4 de marzo de 1888, hijo de los señores Before Souffront y Celia Torres. Además, el matrimonio Souffront—Torres procreó dos hijas más, que fueron: Amelia e Isabel Souffront Torres.

En Puerto Plata recibió el respaldo moral y económico de su tío Adolfo Pérez Torres.

Su primer trabajo lo consiguió cuando abrió sus puertas en Puerto Plata, la Fábrica Nacional de Fósforos, en febrero de 1916, fundada por el industrial y filántropo don José del Carmen Ariza Torres (1861—1953).

.Permaneció un largo tiempo trabajando en dicha Fábrica, como químico empírico. Renunció del mismo.

De ahí decidió dedicarle a ser chofer de guagua, propiedad de Luis Arturo Pelegrín, viajando de Puerto Plata a Gaspar Hernández. Posteriormente cambió de ruta y viajaba de Puerto Plata a Luperón. Le sirvió de ayudante su cuñado Rogelio Almonte por muchos años.

En el año 1926 se casó con Ana Almonte (nacida en el Naranjal, Puerto Plata, el 12 de abril de 1912, hija de Juana Almonte y Joselino Peralta y murió en Puerto Plata, el 26 de diciembre de 1997) y procrearon varios hijos. Tuvo otros hijos con diferentes mujeres.

Sus hijos fueron: Luis, Carlos, Celeste, Adela, Leopoldo, Mercedes, Elena, Miguel, José, Oscar, Rhina, César, Maricela y Ariel Souffront.

Se preocupó por todos sus hijos, dentro de las posibilidades económicas a sus alcances.

Don Fernando Souffront fue un incansable trabajador, que se levantaba a las 4 A. M de las madrugadas  y regresaba a su hogar a las 6 P. M.

Doña Ana Almonte de Souffront mujer que supo ayudar a su esposo en la conducción y educación de sus hijos. Supo enfrentar la vida y encaminar a todos sus hijos por el buen y correcto camino de la vida. Jamás se amilanó a los pocos recursos de que disponían, tanto su esposo como ella misma. Ella fue una mujer que se entregó en cuerpo y alma a la educación de sus hijos. Dama caritativa y siempre dispuesta en ir en ayuda de sus familiares y prójimos. Aunque no tenía escuela, pero tenía una amplia percepción de la vida y sostenía  que la persona estaba en la obligación de estudiar para ser útil en la sociedad. Supo inculcarles a sus hijos una educación hogareña

Supieron conducir a sus hijos a buen puerto con el ejemplo y la perseverancia.

Don Fernando Souffront era un hombre de un temperamento violento, pero amoroso con  su esposa, hijos y amigos.

Fue un fumador empedernido y nunca en su vida tomo ron. Vivió apegado al trabajo y solamente al trabajo productivo.

Tuvo el coraje y la valentía de ser un antitrujilista. No colaboró con el régimen de tiránico de Trujillo desde ninguna posición. Siempre se negó a comprar una placa, que decía: “Trujillo es el Jefe en esta casa”. Nunca se inscribió en el Partido Dominicano

Compartía los mismos criterios e ideas políticas con los licenciados Amiro Pérez Torres  Germán Ornes S y Rufino Martínez.

No ocupó cargos públicos nunca. Mucho menos le sirvió al dictador Trujillo.

Después del ajusticiamiento del dictador Trujillo, el 30 de mayo de 1961, se mantuvo al margen de partidismo político. Todos sus hijos siempre se han mantenido del lado de las causas justa del pueblo dominicano. No tienen de que arrepentirse en sus actuaciones públicas o privadas.

El pueblo de Puerto Plata fue en solidaridad y ayuda económica en favor de una de sus hijas, la señorita Maricela Souffront Almonte (nacida en Puerto Plata, el 16 de diciembre de 1942 y fallecida en Filadelfia, el 5 de diciembre de 1965), que necesitaba ser operada en Estados Unidos. En aquella ocasión esa familia recibió el pleno respaldo del pueblo.

Don Luis Fernando murió en Puerto Plata, el 16 de julio de 1963,