Es cierto: hay gente tan pobre, pero tan pobre, que lo único que tiene es dinero.

La magna concentración de riquezas en tiempos de crisis aguda no conviene ni siquiera a los privilegiados aun cuando se conoce que el poder crea aristocracias cuyo crecimiento exponencial es proporcional a sus dimensiones, de modo que mientras más poderosas resultan esas formaciones criadas en los nidos del establishment económico, más intocables e invulnerables se tornan.

Pero, por fortuna, como a esos seres extraños que andan solitarios en mitad de la noche, sólo de vez en cuando lee uno autores sinceros, honrados, desafiantes, como es el caso del experto Luis Fernando García, que, en reciente artículo periodístico, describe la injusta relación del dinero y las transacciones masivas y altamente ventajosas(tipo la cuota que se roba el león) y que engulle sin control, desollando el autor a los puercos metafísico-y no tan metafísico- de los inmensamente ricos del mundo que se reparten los recursos como botín pirático sin que nadie pueda enfrentar sus desmanes ni disminuir sus ventajas privilegiadas, representadas en las bolsas de valores, el gran poder institucionalizado donde converge toda la perfumada esencia de los capitales monopólicos, “elite que representa el uno por ciento de la población mundial”-, la mayoría de la cual ha sacado un enorme provecho de la pandemia, acaparando recursos, manteniendo en puestos claves y posiciones de liderazgo sus representantes.

Viendo el autor en artículo reciente de La Información, bajo el titulo “ITE mundial se enriquece con la pandemia (Covid 19)” cómo aquellos que quieren despertar, (el 90 por ciento de la población mundial) sigue dormida por el desconocimiento que de las operaciones de estas transnacionales que operan en Wall Street les permite “garantizar el monopolio global de los mercados financieros y las bolsas de valores”.

Y advierte: “esta intervención criminal de la élite en los mercados financieros “ provocará una recesión mundial que quebrará miles de empresas en todos los países cuando ellos (los manipuladores de la economía, nota del autor) decidan retirarse y sacar el dinero que tienen en las acciones en la bolsa, lo que traerá como resultado que millones de empleados vayan a la calle por la pérdida de sus trabajos” y “esos préstamos hipotecarios que ellos tienen, entonces podrán ser ejecutados cuando esa población no pueda pagar sus hipotecas, lo que les garantiza hacer mas riquezas a costa de la ignorancia de nuestros pueblos y el desconocimiento de nuestros pueblos en bolsa de valores”.