En República Dominicana no tenemos sondeos sobre las creencias y prácticas religiosas de la población. El factor religioso, un hecho importante en la formación de la cultura de los pueblos es totalmente ignorado en los censos nacionales. No se recoge la mínima información sobre la afiliación religiosa/o no, de jefes y jefas de hogar. Por ésta razón, carecemos de datos científicos que nos permitan analizar el hecho religioso como lo hacen países desarrollados.
Presento en esta entrega y en la próxima las características de la Iglesia Católica Romana ICR en los Estados Unidos. Esto así porque la existencia de datos científicamente recogidos y analizados, permiten formarnos un juicio objetivo y real para responder a la pregunta del título. Explico aquí las razones por la cual la ICR en los Estados Unidos es importante para la Iglesia universal y para los pueblos latinoamericanos, que como el dominicano, tienen una amplia población de emigrantes residentes en ese país.
La ignorancia es muy conveniente para la jerarquía católica dominicana. Sospecho que han incidido en los censos nacionales para que no se recojan datos sobre la afiliación religiosa de la población. La desinformación permitió ٙen septiembre de 2009 que el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez amedrentara a legisladores y legisladoras del PLD y el antiguo PRD amenazándoles con perder el voto político si no incluían en la Constitución dominicana dos artículos que el Vaticano ha construido para imponer sus doctrinas sobre el aborto y el matrimonio gay a toda la población.
Lo que sucede en Estados Unidos es un buen referente para Republica Dominicana debido entre otras razones a la religiosidad de ambas poblaciones. Según datos del Proyecto Global de Actitudes del Pew Research Center, la mayoría de los estadounidenses dicen que la religión tiene un papel "muy importante" en su vida, una posición que es única entre los países desarrollados; caracterizados estos últimos por un alto nivel de secularización. Pero es importante además por el peso que tiene la jerarquía católica romana estadounidense en la iglesia universal.
Papel preponderante del catolicismo romano de Estados Unidos
La Iglesia Católica Romana (ICR) en los Estados Unidos de América ha pasado de una pequeña minoría durante la época de la Independencia de las Trece Colonias, ha ser actualmente la denominación cristianas más grande de Estados Unidos. Según datos de Wikipedia, los Estados Unidos tienen la cuarta población más grande de católicos romanos en el mundo, después de Brasil, México y Filipinas, con un número aproximado de 68.5 millones de Católicos, casi siete veces más grande que la población total dominicana. En parte este crecimiento se debe a grandes migraciones de países católicos: irlandeses, italianos, filipinos, y especialmente, del sur de su frontera. Los inmigrantes mexicanos constituyen más de la mitad de toda la población hispana residente en los Estados Unidos, seguida por puertorriqueños, cubanos y del resto de la América Latina. De una población total de 321, 601, 000 habitantes en el 2015, los católicos estadounidenses han sido estimados por diferentes fuentes alrededor de una cuarta parte de la población.
Fuentes de la ICR reafirman la importancia de su influencia en el gobierno universal de la Iglesia. No solo por el gran aporte económico de sus fieles, y por la crisis de escándalos de pederastia que ha vaciado templos y seminarios en Europa, sino porque sus diócesis corresponden a 50 estados. El padre John McCloskey, en el periódico digital CatholiCity, afirma en el 2006, que ‘contrario a las predicciones negativas tanto dentro como fuera de la Iglesia, aparentemente el escándalo no ha disminuido la participación sacramental y ni siquiera las contribuciones financieras en las 195 diócesis que componen la Iglesia en los Estados Unidos”.
Argumenta además que en “ vista de las profundas divisiones de los americanos sobre tantos aspectos sustanciales de la moral –de aquí la conocida división entre los llamados Estados azules y rojos en las recientes elecciones-, el bienestar de la Iglesia en los Estados Unidos tiene implicaciones para los católicos en todo el mundo”. McCloskey compara el bienestar de la ICR en los Estados Unidos, con “la situación de aniquilamiento y apostasía prevaleciente en Europa y con el caos de América Latina”. Considera el caso de la ICR en África y Asia de manera diferente, por estar “en pleno florecimiento evangélico” y por su extraordinario crecimiento presagia que “el centro demográfico de la Iglesia se desplazaría hacia el Este y hacia el Sur en los siglos venideros”.
Pero el indicador actual del poder e influencia de la ICR estadounidense en la iglesia universal, lo indican el número desproporcionado de su jerarquía y clero con respecto al tamaño de la población afiliada.. En Estados Unidos hay 13 Cardenales, mientras que en Brasil hay 8, y en México y las Filipinas, 2. Los votos de este país en el cónclave de 2005 que eligió a Joseph Ratzinger fueron más numerosos que los de toda África.
Según la fuente católica de CatholiCity otro indicador de poder es el número de la Jerarquía y clérigos con respecto a la población de fieles. Los católicos en los Estados Unidos constituyen el 6% de la población católica mundial, pero tienen el 12% de los obispos y el 14% de los sacerdotes de la Iglesia. Sólo en los Estados Unidos hay más sacerdotes que en los tres países más católicos, combinados (41,000 en Estados Unidos, versus 37,000 en Brasil, México y las Filipinas juntos).
A corto tiempo la ICR se prepara para el futuro con mayoría de fieles de ascendencia hispánica. Exige o sugiere el aprendizaje del español en sus seminarios, “en vista de que cada día la Iglesia Católica en los Estados Unidos es más una Iglesia bilingüe. Los hispanos registran por lo general una tasa de natalidad mucho más elevada que la de los católicos ‘anglos’, negros o asiático-americanos”__afirma el padre McCloskey.
Estos potenciales católicos, pueden nunca nacer, debido a que el mismo sacerdote afirma que “desafortunadamente, pero sin que sea una sorpresa, la tasa del uso de los métodos anticonceptivos es la misma entre los católicos que en el resto de la población. En consecuencia, el número de hijos en las familias católicas no es sustancialmente distinto al de los no católicos. Hay una tendencia más baja de abortos entre los católicos comparado con el resto de la población pero no es una gran diferencia”.
Por esta situación incongruente entre confesión católica y dogmas incumplidos, el sacerdote plantea la necesidad de diferenciar “entre el católico que asiste semanalmente a la iglesia y el que sólo va unas pocas veces al año”. Esto es, quien es y quien no es un católico practicante. “El resultado puede que sea una Iglesia más pequeña pero mucho más fervorosa y evangelizadora, lista para realizar la Nueva Evangelización en los Estados Unidos que puede producir abundante fruto en los próximos 25 años en el país y en el mundo entero”.
La importancia de la ICR estadounidense es además de orden económico. Esta es una Iglesia independiente, que exporta ayuda internacional y más contribuye a las arcas del Vaticano. Los alimentos de los Estados Unidos son distribuidos sin costo alguno a través de Caritas Internacional, en la América Latina para apoyar las actividades de la iglesia Católica Romana durante todo el año. En cambio las iglesias católicas latinoamericanas son mantenidas por el Estado y/o por donaciones de las Iglesias de países ricos.
En la segunda entrega presentaré los resultados de encuestas en los Estados Unidos que evidencian el desfase de las Jerarquías diocesanas de sus feligresías, y estadísticas que muestran como la apertura al Concilio Vaticano II está correlacionado con una gran disminución del clero, religiosos y religiosas en la actualidad. En la tercera entrega, presentaré el impacto que tuvo en la diócesis de Santiago una entrevista que hice a un grupo de monjas americanas que nos visitaban publicada en el año 1975 en la Revista Amigo del Hogar, cuando yo era religiosa de la orden dominica de Adrian, Michigan.