En el Sistema Político de la República Popular China (RPCh), no se contemplan las elecciones a la manera occidental, elecciones como estas que los dominicanos conocemos y a las que fuimos convocados el pasado domingo 20 de este mes de mayo.
Sí, existen elecciones populares en los distintos niveles del gobierno, para escoger gobiernos locales y representantes legislativos, o sea, los miembros de la Asamblea Popular Nacional (APN), que es donde se eligen y designan las más altas funciones políticas del país. En todo caso, los elegidos deben pertenecer al Partido Comunista de China (PCCh), el partido gobernante, dominante, aunque no único, porque existen otros ocho partidos democráticos.
La mayoría de los críticos de la RPCh entienden que no es una Democracia Popular, sino una dictadura, lo que existe allá, precisamente por eso, porque no permiten elecciones donde participen todas y todos los que quieran ser candidatos, de cualquier partido y utilizando cualquier medio para venderse como es aquí.
Aunque los chinos entienden que necesitan una reforma política, así como se han planteado un nuevo modelo económico, de crecimiento y desarrollo, no creo que la reforma política llegue hasta ahí, o sea, convertirse en una democracia electoral tipo occidente, donde el candidato es un producto que se vende por medio al marketing político, apoyado en encuestas y publicidad sin límites.
Mi humilde punto de vista, mi recomendación, aunque sé que ya los chinos han pensado eso, es que jamás lleguen al desorden electorero que tenemos en estos países, donde se dilapida, se tira el dinero público, se desvía la atención y los recursos a lo banal e infructuoso.
Un ejemplo que de que los chinos necesitan una reforma en su sistema político y con ello en la manera en que escogen sus representantes es el caso “Wukan”. Ese pequeño pueblo cantonés, ubicado en el sur de China, con una población de 20,000 habitantes, se convirtió en un símbolo de la lucha de los campesinos chinos.
Lo que comenzó con movimientos sociales, terminó en la expulsión definitiva de los jefes comunistas locales y la elección por ellos mismos de sus nuevos líderes. Sí, así como lo ha leído, elecciones democráticas, las cuales fueron felicitadas por el primer ministro chino Wen Jiabao y en las que la participación ciudadana superó el 80%.
Los chinos saben utilizar los laboratorios sociales, lo hicieron cuando se inició la transformación y apertura planteada por Deng Xiaoping en el 1978. Comenzaron con zonas específicas de desarrollo y luego de probar que sí se podía y cómo era más conveniente hacerlo, lo fueron extendiendo a todo el país.
Así como China adaptó características de la economía de mercado, para convertirse en un “Socialismo con características chinas”, así mismo, entiendo yo, adaptarán a su realidad, la democracia electoral occidental, para fortalecer su democracia popular y convertirse en una “democracia electoral con características chinas”.
A partir de Wukan, quizás China se encamina a eso, aunque espero jamás tome como modelo la democracia electoral que tenemos en América Latina y que aquí en la República Dominicana ha llegado a niveles alarmantes.