Cuando abrí el periódico esta mañana quedé asombrada al leer en primera plana que, en su discurso de inauguración de la 46ª Asamblea de la OEA, el presidente Danilo Medina “solicitó la aprobación por parte de ese organismo de una resolución de desagravio a la República Dominicana por el rol desempeñado durante la Revolución de Abril de 1965. El mandatario fue enfático en demandar que la OEA pida perdón al pueblo dominicano….”, etc., etc. (1)
El Presidente o está amnésico o es un demagogo de primer orden que, con tal de ganar simpatías políticas, prefiere ignorar el hecho de que la OEA ya pidió perdón por los hechos del 65. En efecto, la prensa dominicana del 19 de agosto pasado reseña las siguientes declaraciones de Luis Almagro: “Como Secretario General de la OEA, deploro los actos de la organización que validaran en 1965 la invasión a República Dominicana y la intervención en este país, torciendo el camino soberano… nuestro respeto y nuestra congoja por las víctimas que sufriera el país de la intervención, validada internacionalmente por la OEA y la intervención que esta aprobara”. (2)
Lo peor de todo es que el reclamo de Medina ante la OEA aparece en la prensa un 14 Junio, fecha histórica para los dominicanos que de nuevo pasó sin pena ni gloria y, sobre todo, sin que la patria por la cual sacrificaron sus vidas los héroes del 1959 se haya dignado rendirles el tan merecido homenaje de declarar ese día como feriado nacional. En vez de eso, el feriado del mes de junio (3) sigue siendo la festividad católica de Corpus Christi, una celebración medieval que la mayoría de la gente ni siquiera sabe qué significa (ni, penosamente, cómo se escribe) y que, en todo caso, debiera ser conmemorada únicamente por los fieles de esa iglesia y no impuesta teocráticamente a toda la ciudadanía.
¿O no es eso justamente lo que hacen las democracias modernas, republicanas y laicas -es decir, garantizar a los creyentes de todas las religiones el derecho a practicar su propia fe, sin discriminación ni coerción alguna, pero sin violar al mismo tiempo los derechos de los no creyentes o de los fieles de otras religiones?
Si Medina es tan patriótico como sugiere su interpelación a la OEA, ¿por qué no ha utilizado el control que su partido ejerce desde hace años sobre las Cámaras Legislativas para modificar las efemérides nacionales, reconociendo la trascendencia de la gesta patriótica del 14 de Junio y la valentía de los expedicionarios de Constanza, Maimón y Estero Hondo que sacrificaron sus vidas por la libertad de TODOS los dominicanos?
Las celebraciones religiosas son particulares y promueven las creencias de un sector particular de la población; las fechas patrias, por el contrario, son comunes a TODOS los dominicanos y promueven valores cívicos indispensables como el amor a la libertad, el patriotismo y el agradecimiento a los héroes y mártires de nuestras luchas democráticas.
Dentro de poco, las nuevas generaciones ni siquiera reconocerán el significado del 14 de Junio para la historia dominicana. No permitamos que eso pase. No seamos una nación de ingratos.
Notas
1. Ver “Medina solicita desagravio a OEA por rol en Revolución 1965”, Periódico Hoy, 14 de Junio 2016, Portada y pag. 6-A
http://hoy.com.do/jce-debio-alquilar-equipos-por-rapido-desfase/
2. “OEA deplora respaldo que brindó para ocupación RD 1965”, Hoy Digital, 19 agosto 2015, http://hoy.com.do/oea-deplora-respaldo-que-brindo-para-ocupacion-rd-1965/
3. Gracias a los desvaríos del antiguo calendario lunar que aun rige el Calendario Litúrgico de la Iglesia Católica, el feriado de este año cayó a finales de mayo. Siguiendo una tradición iniciada en el s. XIII, Corpus Christi se celebra el jueves que sigue al noveno domingo después de la primera luna llena de primavera en el hemisferio norte.