El Sol tiene sus manchas. Los desagradecidos no hablan más que de las manchas. Los agradecidos hablan de la luz. Martí.
No hay asombro alguno por mi parte ante la cruda realidad de la cual ya hice referencia en otra oportunidad, sobre lo enfermizamente que nos gusta jactarnos, aun sin emplear esfuerzo alguno, de adjudicarnos la primacía de cuantas “comparonerías” podemos hacernos dueños. Pero, ahora si podemos decir que somos los primeros… ¡dos y dos!, que entre los cinco, convertirán la decisión en tres y dos, aunque todo el mundo de antemano sabe, conoce o percibe hacia donde se dirige la cosa.
Pero no hay que llorar, hay que saber perder, como dice una vieja pero bella canción. Además, este pueblo esta tan acostumbrado a bajarse los pantalones y solo asentir ceremoniosamente, que nada nuevo pasara. La justicia para los roba ganado o cualquier chuchería, porque nos han hecho creer que en verdad así debe y tiene que ser, sin posibilidad alguna de alternativa para los pendejos y más si son ciegos, sordos y mudos, tal como es este pueblo.
Y no solo llama la atención este caso, porque son muchos por donde se podría revelar este jodido país. Quitan -los espalderos y asociados-, un jefe de la policía por medio de una real y verdadera trama, cual si el problema fuera este, pero ni siquiera por un ligero asomo de pudor político le meten el diente al gran problema institucional de la organización policial, el cual le ha carcomido hasta sus cimientos.
Y ni hablar de la desgraciada corrupción de los funcionarios políticos que se roban hasta las esperanzas de la juventud, de aquella que se ha preparado para hacerle frente a la vida, pero que no encuentran donde ejercer lo que han estudiado, porque un grupito de malvados “lideres” enquistados en el poder, han utilizado los recursos en satisfacer y acumular intereses puramente personales, sin hablar del maldito clientelismo político que nos ha inundado de “prestamos” hasta el mismo cuello, haciendo aún más oscuro el porvenir.
Quizás a este pueblo, en vista a una publicación a página completa en diferentes periódicos, donde se detallan las “bondades” del parasitismo político por medio del siempre bochornoso clientelismo político, sería bueno hacerle saber que todo eso tiene un costo que en el tiempo lo que produce es más miseria y parásitos sociales, vagos, que solo les importa recibir la dadiva. Además, recordarle que pide y se te dará, pide y se te cobrara, pide y lo pagaras, con favores o con votos, pero lo pagaras. Y lo malo de esto es que lo pagaremos todos, hasta los que aun siquiera han nacido.
Y este pueblo, que se hace el pendejo, debe recordar muy bien, tener presente en estos tiempos de burlas, es decir de campaña política, que hace 4 años dijeron que iban hacer lo mismo que están prometiendo ahora, principalmente algunos faranduleros y otros tantos “jugadores”, y además recordar, que “La política es el arte de servirse de los hombres haciendo creer que se les sirve”.
Aquel que lo dude, solo tiene que ver esta delicia; “La ciudad es un ente vivo que necesita ser dirigida con visión de futuro”. Jajajaja y que tiempo quiere para mínimamente en vez de teorizar haga lo que se necesita. ¿Quizás hasta que no pueda coger el palo de golf? En verdad me encantan las salidas magistrales de estos “políticos”. ¡Si señor!