“…Las lecturas de Hostos me permitieron
Conocer qué fuerzas mueven, y
Cómo las mueven, el alma de un
Hombre consagrado al servicio
De los demás”.
Juan Bosch
Amanece y siento el siseo de un pica flor tratando de libar en la flor que ya está seca, pero como ayer lo hizo y al parecer le gusto, trata de sacarle hasta la última gota. Algo parecido al accionar de los políticos con este pueblo. Las mismas promesas y el mismo discurso de hace seis o cuatro años y el mismo incumplimiento sin sanción por parte de quienes los elijen, a sabiendas de que solo los mueve el afán de continuar alimentándose del néctar del poder, pero de aquel que es corrupto e indelicado.
Maniobran de tal manera, que la gente seria desconoce en las mayorías de los casos, que solo han servido como tontos útiles, como trampolín para que los “honorables” sacien sus ambiciones personales. La referencia que hacen de los líderes ancestrales, ofenden ante el descaro con el cual lo hacen. Han olvidado el desprendimiento, el sacrificio de esos líderes por todo aquello que no fuese el interés de la Patria.
Para refrescarle la memoria, como lo hizo el Profesor Bosch en su momento, cuando el Dr. Cutubanama Henríquez le expuso la idea de crear un Partido para derrocar la tiranía de Trujillo, y cuando Bosch le dijo que quien debía ser el líder de ese partido, el Dr. Henríquez le respondió: “Tu” y vaya usted a ver la humildad del profesor al rechazar la sugerencia y responder que a su juicio quien debía de ser era el Dr. Juan Isidro Jiménez.
Pero sus alumnos de un lado y del otro han hecho todo lo opuesto. Cada quien quiere su parcela para negociar con los bienes del Estado y además justificar por cualquier medio, por más increíble que parezca, su ya antológico proceder. Y es que por más que vean, siempre hay que recordar que pájaros del mismo plumaje siempre vuelan juntos. De así no ser, cuantos años tenemos con los famosos concursos de los cuales se sienten tan orgullosos y pregonan como cotorras, muy reglamentados, muy “transparentes” pero que son “ganados” por quien todo el mundo conoce que ganara, dejando algunas sobritas para los pendejos. Es algo parecido a una carrera de caballos donde compiten diez ejemplares y nueve terminan con la boca destrozada por la fuerza que los jinetes ejercen para frenarlos y gane quien tiene que ganar.
Otro asegura que con su llegada al cabildo se acabara el tiempo en que los alcaldes solo escuchan a la gente de esa comunidad, pero luego hacen lo que les da la gana muchas veces sin tomar en cuenta las prioridades del pueblo que lo escogió… ¡Belleza total! O burla, no sé.
Pero lo que está de moda en esta campaña a destiempo es proclamar la transparencia, servir con humildad y sencillez y bla, bla, bla, para embobar a los que no pueden discernir entre las falsas palabras, el engaño y el gran vacío institucional que las mismas encierran.
O esta otra delicia del distinguido empresario de la televisión y buen cómico por demás, que en seis años de Sindico del Distrito no ha podido limpiar siquiera el mercado nuevo, que más bien parece un cerco para la crianza de cerdo y aun así quiere cuatro años más porque los seis no le han sido suficientes para al menos mantener en condiciones dignas el cementerio de la Máximo Gómez. Cosas veredes Sancho.
Pero aun peor. Ahora se destapa un connotado “Líder de masas” y vuelve al mismo tema de la Reforma del Papel aquel, para que se haga lo que nunca se ha hecho, esto es, ponerle coto a la perniciosa reelección, para que los que han hecho posible la misma, ahora cumplan con el mismo engaño que crearon, es decir ¡No reelección! Bendito sea este lenguaje que permite decir tantas cosas y hacer todo lo contrario. ¡Si señor!