(*) Publicado originalmente el 12 de junio de 2016

Antes entrar en  el análisis de los intríngulis del plano profundo y degradante de un fenómeno, que no resiste ninguna prueba de validez social racional, por carecer de todo sentido  ético y  político, como lo es el danilismo.  Quiero traer a colación  algunas tesis de Erick Fromm de  su libro el Corazón del Hombre.

Fromm, trata de establecer que el amor a la vida o a la muerte es la fuerza interior que impulsa  la sociedad  a su autodestrucción o a su libertad a la vida y la esperanza. Cuando aborda en su capítulo III las tendencias contra la vida bajo el tema del amor a la vida y el amor a la muerte dice: “tres fenómenos que, en mi opinión, constituyen la base de la forma más maligna y peligrosa de la orientación humana; son el amor a la muerte, el narcisismo maligno y la fijación simbiótico-incestuosa. Las tres orientaciones, cuando se combinan, forman el "síndrome de decadencia", el que mueve al hombre a destruir por el gusto de destrucción, y a odiar por el gusto de odiar”

Para seguir ilustrando esta modalidad de violencia llamada violencia reactiva o síndrome decadente, que es de la que es objeto Leonel Fernández por parte de Danilo Medina.  Fromm recrea en su libro ya citado, el incidente suscitado en la Universidad de Salamanca en 1936   entre el General Falangista Astray Millán y el Filósofo Miguel de Unamuno, que era su rector. Estos hechos históricos reseñados por Fromm en su libro  ocurrieron así, cito: “Millán Astray no se pudo detener por más tiempo, y gritó: "¡Abajo la inteligencia! ¡Viva la muerte!", clamoreado por los falangistas. Pero Unamuno continuó: Éste es el templo de la inteligencia. Y yo soy su sumo sacerdote. Estáis profanando su sagrado recinto. Venceréis porque tenéis sobrada fuerza bruta. Pero no convenceréis. Para convencer hay que persuadir. Y para persuadir necesitaríais algo que os falta: razón y derecho en la lucha”.

El señor Ramón  Peralta ha hecho sonar el último trompetazo del delincuente publicista brasileiro Joao Santana que asesoró a Danilo Medina, y recomendó nada más y nada menos  que: violencia reactiva sin parar  hasta pulverizar a Leonel Fernández y al PLD.

No se necesita ser un experto en peledeísmos, para afirmar que el PLD pasa hoy por el síndrome decadente de la Torre de Babel, del   que el Danilismo no es la única causa en su derrumbe; pero, si la determinante y mortal: con renuncia a todo tipo de principios ético-morales, pérdida de identidad, destrucción de la organización y estructura sistémica, confusión en el lenguaje,  ausencia de la disciplina, inversión absoluta de los valores de solidaridad, honestidad , respeto y  lo más triste, desconocimiento y cualquierización de la autoridad y los derechos partidarios  de militancia.

Desde la pantana y sus ruedas mellizas en la reunión del CP del PLD en Juan Dolio, el pasado 19 de abril  de 2015, para la modificación constitucional pro reelección,  y por el otro lado, la celebración  de Danilo   en su local de la Sarasota el pasado 15 de mayo  y, no en la Casa Nacional del PLD  como había sido la tradición;  se reafirma la estrategia aplicada  a Leonel y a todo el que se  le oponga,  violencia reactiva.

Violencia  que  tiene como fin  colocar como condicionante sicológico la existencia de una amenaza y miedo a un enemigo único y común, que en el plan y la doctrina danilista es Leonel Fernández Reyna. Veamos que dice Fromm: “la violencia reactiva resultante no se basan en la realidad, sino en la manipulación  de la mente humana; los jefes políticos y religiosos persuaden a sus partidarios de que están amenazados por un enemigo, y así  provocan la respuesta subjetiva de hostilidad reactiva”.

La hostilidad reactiva no discrimina armas para destruir a quien entiende: avasallar es su bandera, aplastar su escudo, desacreditar su himno y comprar su lema.  El señor Ramón  Peralta ha hecho sonar el último trompetazo del delincuente publicista brasileiro Joao Santana que asesoró a Danilo Medina, y recomendó nada más y nada menos  que: violencia reactiva sin parar  hasta pulverizar a Leonel Fernández y al PLD.

(*) Publicado originalmente el 12 de junio de 2016