Los que inventaron el brasier con varillas contradicen a los médicos, respecto a que estos accesorios podrían provocar quistes y otros problemas en los senos, que estos nódulos  podrían convertirse en tumores benignos, y en el peor de los casos incluso en cáncer. Ellos, los diseñadores  afirman rotundamente que no, que nada de eso es cierto.

Hace unos años atrás cuando apenas era adolescente, me encontraba en una tienda, en el área de ropa interior, con un brasier en la mano, de color blanco, hermoso, con una estructura fenomal, con varillas incrustadas y un tanto costoso.

De repente me llamó la atención cómo una señora de cierta edad me observaba y se me acercó para decirme:

“Hola, no compres ese brasier con esas varillas, ciertamente te dan firmeza, pero con el tiempo te pueden provocar problemas de salud, desde un quiste hasta un cáncer”. La señora me lució convincente y sabia.

Sin más palabras, en un abrir y cerrar de ojos la señora se había desaparecido de mi vista,  pero dejó en mí aquella inquietud, que aún llevó, con la  incertidumbre de si sus palabras son más ciertas que las de los diseñadores o no.

Joven al fin, hice caso omiso y continúe usando este tipo de pieza, hasta que hace unos meses empecé a sentir una molestia en mi seno derecho. Cuando fui al médico me diagnosticaron que tenía un pequeño quiste. Justo donde la varilla de la pieza me hace hincapié.

Desde entonces he dejado de usarlos y me siento mucho mejor.

Sé que es mas fácil andar con el busto ceñido y casi perfecto, pero nos vendría bien pensar un momento en nosotras y no en la moda, que muchas veces nos incomoda.

Detengamos el cáncer de mama y tengamos presente hacernos nuestros exámenes de senos a tiempo.