Entrando al Bloque V, el cual abarca del 1901, al año 2000, nos encontramos que este está subdividido en dos aún-Bloques. Nos referimos al Su-bloque A, que recoge datos del año 1901 al año 1960; mientras que en el Sub-Bloque B, el autor abarca del año 1961-al año 2000. Es un Bloque especial, porque aquí se resaltan los aportes de los principales propulsores del Cooperativismo dominicano. Nos referimos a los pioneros del Cooperativismo nacional, Monseñor Ricardo Paolo Pittini Piussi (1876-1961). John Harvey Steele, mejor conocido como el padre Steele (1911-1947). Este fue el que fundó las cooperativas de Boyá y Monte Plata, fundando varias cooperativas más a nivel nacional. Hoy en día, al padre Steele se le considera el padre del Cooperativismo dominicano.
Datos como esos, son presentados por el Dr. Luciano Juan de Dios Castillo Domínguez, lo que permite que esta obra adquiera el valor didáctico y referencial que ya hemos señalado en párrafos anteriores. Es un libro para que el Instituto de Desarrollo y Crédito Cooperativo (IDECOOP), lo asuma como una excusa válida para retomar la debida supervisión, en el sentido de EXIGIR que, aquellas cooperativas que no demuestren el haber realizado un mínimo de tres (3)cursos de Educación Cooperativa, pueda perder su reconocimiento oficial. Esto así, porque la educación en el cooperativismo es lo que asegura que cada socio-a pueda asumir y hacer sentir y reclamar sus deberes y sus derechos, evitando que los "depredadores", fariseos del cooperativismo, desfalquen nuestras empresas de economía solidaria.
En el último tramo, es decir, en el Bloque VI, que abarca del año 2001 al año 2017, el autor hace un amplio compendio de importante hechos y datos acontecidos en la actualidad, demostrando su acuciosa argucia como investigador
El autor rinde especial homenaje a los Pioneros Comunitarios del Cooperativismo Dominicano, por lo que resalta a la comunidad de Manoguayabo, como la Cuna del Cooperativismo Dominicano, de ahí que, nombres como los de Wenceslao Núñez; Juan Inocente Núñez; José Lucía Correa; Thomás Soriano; Juanito Pozo; José Del Pozo; Demetrio Correa; Arístides Martínez; Juanico Correa; Ciriaco Nuñez y Silvestre Núñez, entre otros, no pueden ser omitidos en esta obra y tampoco deben ser desconocidos por los que hemos abrazado el cooperativismo como una forma de participación social activa en esta nación.
Este libro debe ser donado por el IDECOOP a cada cooperativa dominicana, como un aporte a su Comisión de Educación y contribuir así con el fortalecimiento de la formación de cada socio-a.
Cómo se puede colegir, la iglesia católica en el país fue la que contribuyó con el inicio y desarrollo del Cooperativismo a nivel nacional, aunque hoy en día no asuma este accionar a nivel social.
Con la publicación de esta obra, se abren múltiples retos que han de ser asumidos por el IDECOOP y por nosotros-as los-as cooperativistas. Por ejemplo, en esta obra se asume la educación como un parámetro de búsqueda y reclamo de la TRANSPARENCIA, por lo que sugiero al IDECOOP que, desde su Comisión de Ética, instaure el Premio a la Transparencia, para aquellas cooperativas que demuestren con hechos, no simplemente con discursos, su proceder transparente en todos los sentidos: en lo educativo; en el manejo de las finanzas; en la distribución de los excedentes; en la implementación y desarrollo de sus negocios; en el manejo administrativo de sus recursos humanos, combatiendo así el vulgar nepotismo que hoy ahoga a algunas cooperativas que son manejadas burdamente, hasta por vulgares ludópatas y antisociales.
En el último tramo, es decir, en el Bloque VI, que abarca del año 2001 al año 2017, el autor hace un amplio compendio de importante hechos y datos acontecidos en la actualidad, demostrando su acuciosa argucia como investigador.
El autor ha dejado al cooperativismo nacional el gran reto de continuar esta obra y lo hizo de manera premeditada, por lo que en las Conclusiones de su libro nos dice que "Una Cronología de un fenómeno Sociocultural viviente, el cual está sucediendo diariamente, no se puede concluir (…)". Es decir, nos está retando a darle continuidad a este trabajo, para darle vigencia y actualización a los hechos que genera el Cooperativismo mundial  y que se generan en el cooperativismo dominicano.
Como se puede ver, se trata de una obra de retos, en todos los sentidos, sobre todo en lo referente  al actuar apegado a la ética y a la moral, dos conceptos que hoy flotan en el vacío de muchas empresas cooperativas, donde gente sin escrúpulos, repito, se asocian para destruirlas, extirpando sus finanzas de manera fraudulentas, falseando sus Estatutos, para acomodarlos a sus intereses personales, para beneficio de sus asociados y de sus familiares.
Esta obra es un reto hasta para el mismo autor, porque en ella, a pesar del trasiego académico que la circunda, es también una proclama, una denuncia, un desahogo del humanista que procura trillar caminos de esperanzas, desde esta sinrazón que hoy nos acorrala en medio de la incertidumbre. "Cronología del Cooperativismo Dominicano", es la excusa más oportuna para reiniciar el camino de la Educación Cooperativa  y procurar  enderezar los entuertos que, desde hace muchos años, entorpecen el desarrollo de nuestro cooperativismo. Es el momento de empezar. Enfrentemos sus retos, por el bien de la economía solidaria en esta nación.