"Los banilejos sabemos de reguío por tradición. Nosotros mismos hemos hecho nuestros canales" (Agricultores de Baní en su documento del 2 de abril de 1979, no.10)

La intensa sequía y una presunta “falta de equidad” en el suministro de agua tienen al borde del colapso la próxima cosecha de mangos en Baní, provincia Peravia, 70% de la producción nacional.De acuerdo con Onésimo Mejía, presidente de la Asociación de Productores de Mango, las expectativas de crecimiento en las exportaciones del fruto apuntan a revertirse y traducirse en “pérdidas millonarias” ante la falta de agua para irrigar las plantaciones.Rafael Leger, presidente del Clúster Productivo del Mango, manifestó que “La producción principal de todo el mango de Baní depende de ese canal del Marcos A. Cabral, es a través de riego… la situación es sumamente crítica porque ahora es el momento de la floración, en que se necesita el agua y que el Estado mire hacia Baní”.Acento.com 13 enero de 2015

Grupos agropecuarios de la provincia Peravia anunciaron un paro para el próximo 22 de octubre en protesta por la mala distribución del agua.Representantes de la Federación de Campesinos Banilejos y del Comité para la Defensa de la Salud el Medio Ambiente y la Agropecuaria de la provincia Peravia denunciaron que el agua de la presa de Valdesia se envía en su totalidad para Santo Domingo, situación que ha retrasado la siembra de cebolla y disminuido la producción de leche en más de 50 %Diario libre, 16 octubre de 2014

Unas 96,881 tareas de tierras sembradas con diferentes renglones podrían perderse aquí debido a la sequía que afecta al país, la cual ha dejado prácticamente “secas” las presas de Valdesia y Jigüey. Así lo predice el gerente de la Junta de Regantes Nizao-Valdesia, Eugenio Peña. “La situación de nosotros es realmente desastrosa, prácticamente todos los cultivos y buena parte de la ganadería va a sufrir serios percances por la falta de agua”, señaló. Explicó que hasta ayer les estaban suministrando agua al canal Marco Antonio Cabral tres días a la semana, los cuales se aprovechaban para el riego, pero debido a que las presas se han agotado y están en sus niveles mínimos, solo le servirán el líquido dos días. Peña advierte que si el presidente Danilo Medina no acude en auxilio de los agricultores de Peravia se perderán enormes cultivos de plátano, guineo, ají, lechosa, yuca, berenjena, algunos mangos, maíz y pasto. Hoy, 12 de julio de 2014

El agua del canal Marcos A. Cabral, por el sector denominado “La Batea”, continúa desperdiciándose sin que las autoridades del INDRHI se preocupen. Al final de la calle Duvergé Sur, que conduce a Boca Canasta y El Llano, se observan las compuertas del sistema de riego cerradas por lo que el agua se va por un colateral y penetra a las calles y áreas residenciales.
Se pudo observar que varias cañadas estaban repletas del agua que se desborda del canal. Barahonero.com

El director ejecutivo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), ingeniero Olgo Fernández, productores agrícolas y ganaderos de esta provincia acordaron la puesta en marcha de medidas alternativas para enfrentar la sequía que afecta la producción y el ganado. En un encuentro celebrado en el Centro Cultural Perelló, en el que estuvieron presentes autoridades civiles y militares, encabezadas por el senador Wilton Guerrero, el director del INDRHI y los productores debatieron ampliamente la problemática creada por la falta de lluvia en la cuenca del río Nizao. Almomento.net, 13 de enero de  2015

Productores agrícolas y vecinos de esta localidad, representados en 25 organizaciones, realizaron  una concentración en la plaza cultural del ayuntamiento y luego marcharon hacia la gobernación en reclamo de agua para sus predios agrícolas y el ganado, “que se muere de sed en nuestras fincas”, señalan.Baní padece una aguda sequía que se ha extendido por ocho meses, dejando sin agua ríos, arroyos, las presas de Valdesia, Jigüey y Aguacate, las cuales están en su mínina cota de embalse, provocando un serio estancamiento en la producción agrícola de esta provincia.  Además de los productores, asociaciones campesinas, profesionales, ganaderos y otros, estuvieron las principales autoridades, como el senador Wilton Guerrero, el alcalde Nelson Camilo Landestoy, el diputado Santo Ramírez, funcionarios del INDRHI, de Agricultura y otras áreas que apoyan los reclamos. ListínDiario, 15 de enero de2015

 

Máximo Pol
Máximo Pol

Sobresale en estas publicaciones, que resumen casi un año de crisis del suministro de agua en la provincia Peravia, una nota de Listín Diario que dice “Los productores agropecuarios advirtieron que de no racionalizarse el agua de forma equitativa y proporcional, según las necesidades de las comunidades, se lanzarán a las calles para exigir sus reivindicaciones” (negritas mías, RAG). Sobresale también el hecho de que de todas las localidades del país donde se cultiva bajo riego solamente en Baní hay crisis por la distribución del agua. Entonces, la causa principal la crisis no es la sequía sino la distribución.

Otro detalle es que, a diferencia de otros momentos en que ha aflorado el conflicto por la distribución del agua en Baní, ahora hay representantes de instituciones estatales alineados con los afectados. ¡Incluso militares!¿Un cambio en la correlación de fuerzas?

El meollo del conflicto parece hallarse en que, mientras el agua alcance  para todo no hay problemas en Baní. Tan pronto escasea, la distribución se hace en detrimento de quienes menos pueden. Y es una historia larga, una lucha de décadas, dormida por tiempos, pero recurrente.

El conflicto del agua en Bani  36 años atrás

Los primeros meses del año 1979 fueron de pocas lluvias. Claro, el ciclón David y la tormenta Federico cambiarían el panorama, pero eso sería  del 31 de agosto de aquel año en adelante.

En junio de ese año visité las zonas agrícolas de Baní como redactor de la revista de circulación nacional Amigo del Hogar. El sempiterno conflicto del agua estaba en su apogeo. Entrevisté a dirigentes locales y recorrí áreas bajo riego en Boca Canasta, Sombrero, El Llano y Calderas, en busca de las raíces del conflicto. El resultado quedó sintetizado en un artículo titulado “El canal de Baní: historia de una lucha de intereses”[i] Los agricultores banilejos cultivan bajo riego desde mediados de la década de 1870. “El canal Marco A. Cabral, sin embargo,  comenzó a funcionar en 1946, lo que dio lugar a una mejor organización del riego y un incremento de las tierra irrigadas. Desde el principio los grandes beneficiarios del canal han sido los Vicini ya que con él riegan la caña de azúcar que muelen en su ingenio CAEI; hubo un tiempo en que se irrigaban con las aguas del canal 50 mil tareas sembradas de caña. Originalmente el canal fue construido para re­gar 48 mil tareas. Posteriormente, en dos ocasiones, fue ampliado, hasta llevarlo a su capa­cidad actual (en 1979) de alrededor de 200 mil tareas”.[ii]

En 1979 el conflicto fue espoleado por un proyecto de ampliación del canal mayor al cual se oponían los agricultores. Este proyecto databa de 1974 y pretendía casi duplicar el caudal del canal, de 12 a 21 metros cúbicos por segundo. En un comunicado firmado por 45 organizaciones de Baní se afirmaba que durante la campaña electoral del año pasado el ahora presiden­te Guzmán les prometió que, una vez tomara el poder, anularía el plan de ampliación del canal y daría paso a la construcción de un nuevo canal en la parte norte de la provincia.[iii] Ya antes había sucedido un incidente al respecto, el cual fue reseñado por El Sol. Informaba el popular matutino: “En Boca Canasta, Bani, las divergencias y acusaciones de supuesta corrupción rompieron el sábado un diálogo del INDRHI y millares de agricultores opuestos a la ampliación del canal Marco A. Cabral y otras obras que ejecutará el Gobierno por 52 millones de pesos en áreas de la presa de Valdesia. Tendrán que pasar sobre nuestros cadáveres y construir una nueva cárcel si pretenden seguir adelante con la ampliación del canal, expresaron delegados enviados a la reunión por las asociaciones agrícolas".[iv]

Ineficiencia, inseguridad y discriminación

La ineficiencia y la discriminación provocan inseguridad en el suministro de agua, según me explicaron en detalle Sigifredo Mejía, de Sombrero, y Onilio Sánchez, de Boca Canasta, directivos de la Junta Provincial Agropecuaria; y Máximo Pol, del Comité de Salvación de la Agricultura de Bani. Esto se debe, dijeron, a que la presa de Valdesia está orientada básicamente a la producción de energía eléctrica. Cuando el embalse de la presa tiene poca agua, lo dejan llenar para luego turbinar el agua. El resultadoes el siguiente: Los canales pasan díasy hasta semanas secos; un día, de repente, traen tanta agua que hay que dejar pasar la mayor parte. Son sequías artificiales, que si suceden en momentos críticos para el desarrollo de los cultivos, los agricultores sufren pérdidas cuantiosas.

El canal Marco A. Cabral está diseñado  para un caudal de 12 metros cúbicos por segundo a lo largo de sus 70 kilómetros. Teóricamente este cau­dal alcanzaría para mojar 192 mil tareas. La reali­dad es distinta. El canal sólo lleva 7.8 metros cúbi­cos, con lo cual podría regar 124 mil 800 tareas. Pero sucede que el sistema de riego de Baní opera con una eficiencia de apenas treinta y pico por ciento del agua llegan hasta las parcelas de cultivo; el resto se pierde en el camino. Solamente el agua que circula por tres arroyos antiguamente secos alcanza a 2.5 metros cúbicos por segundo, suficiente para irrigar 40 mil tareas. Y hay otros ocho arroyos antes secos que llevan agua fugada del canal mayor.La ineficiencia se debe a falta de limpieza en el canal mayor, falta de encache (cemento) en los ca­nales laterales, fugas, mala administración, etc. to­do lo cual podría corregirse.[v] Un agricultor a quien entrevisté en Boca Canasta me dijo: "Nosotros nos pa­samos a veces dos y tres días esperando el agua, mientras hay jorocones que tienen agua en su fin­ca corriendo el día entero sin necesidad".[vi]

Demandas principales

No supe en que quedó el conflicto entre las autoridades y la comunidad de Bani en su conjunto, cuáles de los elementos de este conflicto persisten. En aquel momento estas fueron las demandas principales de la Junta Pro­vincial Agropecuaria, el Comité de Salvación de la Agricultura de Baní y las 45 organizaciones:

1.- Que el Gobierno anule el proyecto de amplia­ción del canal Marco A. Cabral el cual es innecesa­rio ya que la misma firma que realizó el estudio de­terminó que la cantidad de tierra que puede regarse con dicho canal es de 160 mil tareas, lo cual puede hacerse con la capacidad actual del canal si el mis­mo se rehabilita.

2.- Que se construya un canal en la zona norte de la provincia para regar más de 100 mil tareas en beneficio de 6 mil familias e impulso a la econcomía nacional. Los 52 millones de pesos que van a gas­tar en ampliar el Marco A. Cabral pueden utilizarse en desarrollar zona norte. El canal norte debe salir del embalse de Valdesia, por encima de la cota 130. Las autoridades dicen que eso puede afectar la generación de electricidad, pero hay que pensar en qué es lo más importante.

3.- Que se continúe el proyecto original de apro­vechamiento de la cuenca del río Nizao.

4.- Que se proceda a rehabilitar totalmente el canal Marco A. Cabral, que se mejore la adminis­tración y manejo de las aguas por parte del INDRHI y que se dé tratamiento igual a todos los usuarios.

Lo que planteó Salvador Dájer

El ingeniero Salvador Dájeres la voz más autorizada que ha tenido el país en materia de obras hidráulicas, con su ojo siempre puesto en el futuro bienestar de la colectividad.  En algún momento calificó de crimen “haber sustraído seis metros cúbicos del embalse de la Presa de Valdesia para traer agua a Santo Domingo”.[vii]Una parte de mi artículo de 1979 lo dediqué a la opinión de Dájer sobre el caso de Baní:

“El "Listín Diario", en un editorial a principios de abril, se manifestó opuesto a la ampliación del canal.En ese mismo periódico se publicaron dos cartas del ingeniero Salvador B. Dájer, una de las perso­nas que más saben del asunto del canal.La segunda carta del ingeniero Dájer apareció en el Listín el día 17 de abril y de ella copiamos algu­nos párrafos:

"Mi proposición para un canal paralelo, tal como lo describo a continuación, no es para alimen­tar el Marco A. Cabral, aunque si fuera necesario podría hacerlo, sino para regar tierras nuevas, más de 50 mil tareas adicionales, independientemente de las 160 mil que incluyen las de Matanzas y Cal­deras, que el Marco Á. Cabral limpio y reparado podría hacer por sí solo, eficientemente, con los 12 metros cúbicos que sin ampliación puede condu­cir; proyecto que consiste básicamente en cons­truir un canal túnel de 8 kilómetros de largo con su entrada en el contraembalsede Las Barias a la altura de la cota 74 más o menos, y su salida en cota 72 en el lugar denominado Escondido, entre el arroyo Paya y el río Bani, muy cerca del km 38 del Marco A. Cabral … construcción que es tan económica y viable como la realizada en el canal temporero José Joaquín Puello en San Juan de la Maguana, donde con un túnel de 4 kilómetros a través de una montaña se evitó la construcción de 30 kilómetros de oneroso canal.Como la rasan te de fondo del canal Marco A.Cabralen el km. 38 está cerca de la cota 51, existe una diferencia de 21 metros en altura entre el canal y la cota 72 de la boca de salida del túnel, diferen­cia que permite el riego de miles de tareas nuevas comprendidas entre el arroyo Catalina, el rio Bani y el Marco A. Cabral.Además, la salida en cota 72 permite alimentar por gravedad el canal Juan Caballero para el riego de sus 36 mil tareas sin necesidad del costoso bom­beo propuesto en el proyecto de ampliación.

Sería arduo enumerar todas las ventajas, posibi­lidades y variantes para el mejor aprovechamientodel canal túnel, de las que se puede adelantar que son infinitamente superiores a las de cualquier otro proyecto, sobresaliendo su menor costo de cons­trucción y de mantenimiento, su mayor rendimien­to y seguridad y que no compromete ni reduce la producción de energía de Valdesia"[viii]

Valdesia está al servicio de la industria

Leandro Guzmán
Leandro Guzmán

El ingeniero Leandro Guzmán, director del INDRHI, en una entrevista que le hizo el periódico Agro­noticias en mayo de 1979 declaró: "Ellos proponen un asunto que saca de opera­ción de manera definitiva la casa de máquinas de la presa de Valdesia, que hoy día constituye una po­tencia real y efectiva de un 17 por ciento de la potencia instalada en el país para la energía que se suministra en las horas de pico, es decir,  en las horas de mayor consumo". O sea, que el INDRHI se basaba en consideraciones puramente técnicas para llevar adelante el proyecto de ampliación. He aquí lo que le dijo el ingeniero Guzmán a los agricultores banilejos en la reunión de Boca Canasta: “… los proyectos de riego se realizarán tal como están pre­vistos, en virtud de que no existe ningún estudio que demuestre que las obras no son adecuadas para el desarrollo agrícola de la región".[ix]

Baní en el proyecto de modernización agrícola

En julio de 1979 yo observé el conflicto por el agua en Baní no como un proceso local sino como manifestación de las pugnas entre grupos sociales que se daban por la implantación de un proyecto general de modernización del agro, puesto en marcha por factores de poder locales y el poder metropolitano.Yo decía: “A simple vista el proyecto de ampliación del ca­nal Marco A. Cabral y las obras a realizarse en el área de influencia de la presa de Valdesia, aparecen como un problema local, un problema de Baní.Y no es así, todo esto es parte de un proceso que se está verificando a nivel nacional.Sucede que la economía del país se está moder­nizando poco a poco. La ascensión al poder del gobierno perredeísta tiene por finalidad, en gran medida, el crear cambios políticos que impulsen con más vigor dicho proceso, Balaguer le dio inicio al desarrollismo en 1966 pero ya constituía un obs­táculo para su continuación.En la agricultura, la modernización exige con­centrar la tierra y el agua en grandes cantidades. La excesiva división de la tierra, como sucede en Baní, es un freno para el desarrollo de la produc­ción agrícola.Las obras que se realizarán en la cuenca del río Nizao apuntan hacia la modernización de la agri­cultura en la zona de Baní y este proceso va a significar el desplazamiento de miles de familias campesinas, a largo plazo. No es solamente el he­cho de que al ampliar el canal la berma (ambas orillas del canal, de un lado va una carretera y del otro lado se deposita la tierra al hacer la zanja) es más grande y los que tienen parcelas al lado se per­judican; es también que al ampliarse el área de rie­go entra un nuevo tipo de agricultor, un agricultor moderno, capitalista, un empresario”.

La lucha por el agua hoy adquiere matices diferentes pero en el meollo sigue estando el control de los medios de producción. ¿Qué son los productores de mango sino empresarios? Entonces, no se extrañe nadie de ver al principal líder político de Bani, senador Wilton Guerrero, diputados y funcionarios, incluso militares, interviniendo en el conflicto desatado por la crisis del agua, en  enero de 2015, a 36 años de aquella crisis que unificó a Baní como nunca antes en su historia.

De los 52 millones que costará la ampliación del canal, 27 millones serán en dólares, prestados por el Banco Mundial. Precisamente una de las razones que ha expuesto el INDRHI para llevar adelante el proyecto de ampliación es que el Banco Mundial aprobó los es­tudios que se hicieron al respecto… "el director del INDRHI asegura que hasta ahora las alternati­vas planteadas por los opositores al proyecto no se consideran factibles, y a modo de ejemplo dijo que si técnicamente los estudios del INDRHI hubiesen sido incorrectos, entonces el Banco Mundial no hu­biese concedido el préstamo. Si un proyecto no es factible el Banco lo descarta". ¿Tomó en cuenta el Banco Mundial, además de los estudios técnicos, las implicaciones sociales de la ampliación del canal Marco A. Cabral?


[i]Amigo del Hogar, julio de 1979, páginas 34-38

[ii]Ídem

[iii]El Sol, 20 de junio de 1979

[iv]El Sol, 7 de mayo de 1979

[v]Amigo del Hogar, ídem, página 36

[vi]Ídem

[vii]Citado por Leandro Guzmán en El Nacional, 11 de noviembre de 2010

[viii]Amigo del Hogar, ídem, página 38

[ix]Amigo del Hogar, ídem, página 38