El candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana, Danilo Medina, parece que olvido en su discurso de proclamación que a su vez es presidente de la Republica Dominicana, ya que dentro de su rosario de promesas electorales incluyo dar seguridad a los ciudadanos ante la ola de criminalidad que nos arropa. Un presidente no puede ofrecer seguridad, su deber es darla.

Paradójicamente uno de sus funcionarios, el pintoresco ministro de lo Interior, en una de sus acostumbradas declaraciones altisonantes dijo que la tasa de delincuencia y criminalidad no era tal y que era percepción lo que tenia la ciudadanía. Pero como el destino es impredecible, al otro día de sus declaraciones, a las 11 de la mañana y en una transitada vía como la avenida 27 de Febrero atracaron a una prestigiosa y respetada comunicadora, Doña Socorro Castellanos, quien es además funcionaria consular del gobierno peledeista.

Este gobierno ha fracasado estrepitosamente en proteger a los ciudadanos de los delincuentes. Este gobierno ha probado ser incapaz siquiera de registrar los motores que circulan sin documentos y sin placas por nuestras calles, y como no están registrados no pueden ser identificados, por ello el Jefe de la Policía Nacional en un acto de impotencia ha ordenado a sus subordinados detener a todo motorista que luzca sospechoso, me imagino que para ello han identificado un perfil de quien pudiera ser sospechoso y quien no, ojala lo hagan también para los corruptos, pero el trabajo los desbordaría pues tendrían que detener prácticamente a todo el gobierno morado.

Un punto que obvió el presidente candidato en su discurso de marras fue el del endeudamiento a que ha sometido el país, me hubiera gustado oírlo decir que piensa hacer para no seguir hipotecándonos y como pagaríamos la deuda que los gobiernos peledeistas han tomado para mantener un ejercito de parásitos cobrando sin realizar ninguna función beneficiosa para el Estado.

Afortunadamente estamos a pocos meses de tener la oportunidad de salir de un partido que como gobierno ha sido inepto, incapaz, derrochador y corrupto, solo tenemos que sumarnos a la nueva mayoría que representa Luis Abinader, un político joven, decente y preparado para enfrentar el panorama sombrío en que los peledeistas han sumido el país.