Es mucho lo que escuchamos hablar en las calles, en los medios escritos, radiales y televisivos, sobre el crecimiento económico y el desarrollo económico y que nuestro país experimentó un crecimiento económico por muchos años previo a la pandemia de COVID-19, según el Banco Central de la República Dominicana, pero las personas dicen que nunca percibieron ese crecimiento y se preguntan ¿cómo es que hemos crecido y no vemos ese crecimiento económico reflejado a nivel personal y en nuestra vida cotidiana?
Sucede que, cuando hablamos de crecimiento económico y desarrollo económico no se está hablando de lo mismo, el desarrollo es que refleja el bienestar de los individuos, no el crecimiento económico. Sin embargo, es importante destacar, que existe una distinción clara entre ellos. Ambos conceptos van de la mano, ya que, para que ocurra un desarrollo económico es necesario el crecimiento económico, pero no porque haya un crecimiento económico va a existir siempre un desarrollo económico.
Para que el crecimiento económico se convierta en desarrollo, tiene que pasar lo siguiente: ir de la mano con una distribución equitativa de los frutos de ésta, también se requiere que el crecimiento sea sustentable y que no represente escasez para las generaciones futuras; un crecimiento responsable, que sea disfrutado por todos, sin concentración de riquezas ni daños al medio ambiente y que considere el aspecto más básico de la economía, proveer de bienestar a los individuos.
Muchas veces no entendemos la forma en la que esto nos beneficia, pareciera que a pesar que el gobierno reporta avances económicos constantemente, éstos no llegan hasta las personas que trabajamos todos los días para llevar el sustento a nuestro hogar.
El crecimiento económico y el desarrollo económico de los países son conceptos técnicamente diferentes. El crecimiento económico, se refiere al incremento de ciertos indicadores, como la producción de bienes y servicios, el mayor consumo de energía, el ahorro, la inversión, una balanza comercial favorable, el aumento de consumo de calorías per cápita, etc. Mientras que, el desarrollo económico por su parte, es la capacidad de países o regiones para crear riquezas a fin de mantener la prosperidad o bienestar económico y social de sus habitantes.
Para que exista desarrollo económico, es preciso, primero incrementar la riqueza del país, es decir, el PBI, por lo tanto, primero llega el crecimiento económico para luego dar paso al desarrollo económico.
No basta tener solamente un crecimiento económico para que este se pueda ver y sentir en la población, aunque, tener tasas de interés bajas o mayores exportaciones, es algo bueno para todos, aunque, esto no significa que el país está avanzando a una ruta de bienestar; para esto deben darse los dos indicadores, tanto el crecimiento económico como el desarrollo económico.
Cuando estos dos indicadores se empiezan a dar, se comienza a reflejar la prosperidad o bienestar económico y social de sus habitantes.
En conclusión, a donde debemos llegar es al desarrollo económico, que es el avance de la riqueza económica de un país, dirigido al bienestar general de los ciudadanos.