Esto podría parecer medio extraño, pero en algún momento no les ha dado deseo de que alguien con acceso a su computador, no pueda ver cierta información y el poder mantener algunas cosas de forma privada.
Al crear una carpeta invisible, tendrás todos tus archivos “secretos” a mano y evitarás que estén a la vista de miradas indiscretas. Cuando compartimos el computador con otras personas, nunca está de más disponer de un área privada a la que otros usuarios no puedan acceder.
Gracias a las cuentas de usuario de Windows la segmentación es instantánea, pero siguen existiendo zonas de acceso común y en las que puede que nos interese situar algo que los demás no puedan ver a simple vista. Una de las formas más habituales de ocultar archivos y carpetas en Windows es marcarlas como ocultas (haciendo clic derecho sobre el elemento en cuestión y, desde el campo de Propiedades activando la casilla de “oculto”). No obstante, esto solo es práctico si hemos configurado el sistema para que no muestre los archivos y carpetas ocultos, ya que de otra forma se mostrarán (con cierta atenuación, pero plenamente visibles).
Una opción más curiosa y eficaz, y que funciona desde Windows XP hasta Windows 10, es el que nos permite crear una carpeta invisible. En primer lugar, tendrás que crear una carpeta en la ubicación que prefieras, con el procedimiento habitual.
De momento no hay que preocuparse por el nombre, ya que eso lo arreglamos en el siguiente paso, luego una vez creada, haz clic con el botón derecho sobre ella, entra en Propiedades y diríjase a la pestaña Personalizar. Aquí, deberás cambiar el icono de la carpeta, que es la forma con la que conseguiremos “engañar” a Windows. Basta con escoger un icono vacío (que no muestre contenido alguno) y listo.
Deberás ir probando hasta dar con uno que sea completamente transparente, escogiendo los que muestren un espacio vacío y aplicando los cambios hasta que des con el adecuado. Para eliminar el nombre de la carpeta, debes de cambiar el nombre de esta, de manera que no muestre nada.
Por regla general, Windows no permite dejar vacío el nombre de un archivo o carpeta, por lo que hay que tomar un atajo. En el mismo menú de Propiedades del paso anterior, en esta ocasión hay que entrar en la pestaña General y, en el campo del nombre del archivo o carpeta, pulsa la tecla ALT y escribe (0160) (sin el paréntesis). De esta forma, conseguiremos que el nombre no se muestre, aunque eso sí, esto solo funciona usando el teclado numérico, con lo que si tu PC no dispone de él, tendrás que escoger un símbolo que pase lo más desapercibido que sea posible (como por ejemplo una coma).
A partir de este momento, la carpeta quedará totalmente oculta (al menos a simple vista), y solo la verás si seleccionas con el ratón el área en la que se encuentra.