El señor Álvaro Arvelo fue suspendido la semana pasada por veinte días porque el Instituto Duartiano y la Comisión de Espectáculos Públicos entendieron que ofendió la figura de Juan Pablo Duarte padre de la Patria. Desde mi interpretación me parece que lo único que considero ofensivo entre todo lo que dijo es la afirmación de que Duarte fue un irresponsable que sumió su familia en la pobreza y que no hizo por nada por esta patria pues se ausentó en los momentos en que más se le necesitó.
El Señor Arvelo, más que nadie, sabe las razones por las que Duarte se ausentó y también por qué murió en la pobreza, ya que inclusive una pensión que le ofrecieron nunca se la dieron. Empero no me parece ofensa llamarle homosexual pues no creo que la orientación sexual de nadie deba ser una ofensa, como tampoco me parece ofensa que le llamen depresivo ya que eso es una condición de salud que inclusive existen autores que afirman esa posibilidad. La otra manera en como le llamó fue vacilante y esto tampoco creo que sea ofensa, pero mi consejo va en otra dirección.
Creo que la gente en la vida cosecha lo que siembra. Álvaro Arvelo asumió un personaje que por hacer subir los intereses económicos de un empresario radial y elevar el rating de un programa se ha enemistado con la sociedad, hoy nadie ha salido en su defensa salvo algunos comunicadores, aunque existen elementos para ser defendido.
Recuerdo cuando fue operado del corazón; se supone que en un momento de problemas de salud se suele generar un aluvión de solidaridad, sin embargo cuando leía los comentarios que hacían las personas al pie de las noticias todos eran insultándolo y deseándole la muerte.
Pienso que la comunicación se ejerce para la gente y que debe ser el público quien apruebe o no nuestro trabajo, sin embargo siento que el señor Arvelo debe aprovechar esta situación para revisarse pues una persona con tantos conocimientos como los que él posee debería tener mejor posicionamiento ante la sociedad porque es mucho lo que puede aportar, sin embargo no es así. Debe definir si hace comunicación para el pueblo o para los intereses de ciertos grupos políticos y económicos y todavía está a tiempo.
Ojalá que algún día él quisiera cambiar porque estamos ante un ser humano que de nada le ha servido los niveles de conocimientos que ha adquirido al punto de autoproclamarse la enciclopedia humana. Este debería ser un momento para que él reflexione su actitud y es bueno que se sepa que no le conozco y que le estoy ofreciendo un consejo sano.