Porfirio “Pepe” Lobo gobernó Honduras del 2010 al 2014. Su hijo Fabio Porfirio Lobo fue capturado por la DEA en Haití en el 2015, por usar influencias y conexiones políticas para traficar con cocaína antes, durante y después de la presidencia de su padre. Fabio articuló el apoyo logístico de congresistas, altos funcionarios, agentes aduanales, militares, policías y jueces para transportar drogas hacia y desde Honduras, incluyendo una operación de 3,000 kilogramos de cocaína del cártel de “El Chapo” Guzmán. En Septiembre 5, 2017 Fabio Porfirio Lobo fue condenado en New York a 288 meses de prisión, 24 años de cárcel. La esposa de Porfirio Lobo, Rosa Elena Bonilla de Lobo, exprimera dama hondureña fue condenada anteayer 4 de Septiembre, en Tegucigalpa, a 58 años de prisión por 11 delitos cometidos actuando como Primera Dama y que abarcan 3 cargos de apropiación ilícita de fondos públicos y 8 por comisión de fraudes. Saúl Escobar exsecretario del Despacho de la primera dama fue condenado a 48 años de cárcel.
Porfirio Lobo se inició joven como político en el conservador Partido Nacional. Se tituló en Administración de Empresas, en “Florida Internacional University” y estudió Ciencia Política en la Universidad Patricio Lumumba de Moscú. Ganó las primarias para competir por la presidencia en elecciones de Noviembre del 2005, gracias a su promesa de restituir la pena de muerte, que caló en los votantes ante una masacre de 28 personas asesinadas por pandillas. Lobo compitió contra Manuel Zelaya, “Mel”, empresario agropecuario del centroderechista Partido Liberal. Usando sombrero y botas de vaquero como Vicente Fox exclamaba: “Mi negocio es ser honrado”. Prometió, falsamente, que él y sus ministros irían a sus oficinas en autobús.
La misma noche de las votaciones Zelaya proclamó su triunfo, basándose en sus encuestas a boca de urna. El Tribunal Superior Electoral lo declaró “Presidente Electo” con el escrutinio de sólo 151 mesas del total de 5,312. Inicialmente Lobo protestó, pero luego negoció y reconoció el triunfo de Zelaya a cambio de impunidad para funcionarios de su partido, del gobierno saliente. Zelaya se juramentó como conservador el 27 de Enero de 2006. Fidel no fue invitado. Chávez no asistió aunque fue invitado. En Enero 2008 apretado económicamente Zelaya invitó a Chávez, se afilió a Petroamérica, normalizó relaciones con Cuba, y estrechó vínculos con Ortega. En Agosto 25, 2008 Honduras se convirtió en sexto Miembro del ALBA, con la presencia de Chávez, Ortega, Evo y el vicepresidente cubano Carlos Lage. Chávez elogió el “coraje” de Zelaya llamándole “Comandante Vaquero”.
Impopular, con serios problemas financieros, de inseguridad e imagen, Zelaya abandonó su enfoque latifundista y se adhirió a la doctrina del “Socialismo del Siglo XXI”. Los “Bolivarianos” y compartes patentizaron el antidemocrático método de modificar la Constitución para perpetuarse en el poder, desde el poder, con reelecciones amañadas. Así lo hicieron Chávez, Maduro, Evo, Ortega, Correa y hasta Danilo en el 2016. Zelaya quiso violar el “nunca jamás” y planteó que en las siguientes elecciones del 2009 se usara “una cuarta urna” inventándose un mañoso plebiscito regulado por el Instituto Nacional de Estadística INE, que había sido prohibido por las autoridades electorales. Zelaya insistió en organizar esa ilegal consulta plebiscitaria meses antes de las elecciones regulares. Opositores, empresarios y jueces, presuponiendo que pretendía violar la Constitución, para continuar gobernando después del 2010, incitaron a los militares contra Zelaya y lo derrocaron, enviándolo en pijama a Costa Rica. El Congreso lo destituyó por “violar la Constitución”.
Dentro del caos generado por el golpe de estado, Porfirio Lobo ganó en el 2009 elecciones muy cuestionadas, con un 57 % de la votación. En la transición viajó a Santo Domingo y pactó con Leonel que Zelaya, que estaba exiliado en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, vendría a vivir acá. Leonel fue a la toma de posesión de Lobo y retornó con Zelaya. Lobo presidió con muchos cuestionamientos. Anteriormente, siendo congresista, había sido juzgado, acusado de malos manejos, cuando administró la Corporación Hondureña de Desarrollo Forestal (COHDEFOR), pero fue descargado “por falta de sustento”. Los mismos narcotraficantes del cártel “Los Cachiros” que implicaron a su hijo, declararon en New York que también el Presidente los había apoyado, a cambio de sobornos. Su hijo, con pena de 24 años está pagando, por ahora, la culpa de los dos. En países del área juzgan y condenan a quienes apoyan el narcotráfico desde el poder y a los que se apropian de fondos públicos. Eso ocurre porque han tenido justicia independiente.