Luego de gastos que el gobernante entendió necesarios, aunque la mayoría de la población entendió injustificados; luego de años de utilización de los recursos del Estado para mantener vidas acomodadas, realizar actividades y fiestas diseñadas para engrandecer la figura del gobernante, pero donde el pueblo solo participa para pagar la cuenta;luego de mantenerse en el poder, imponiendo su voluntad principalmente a través del uso inescrupuloso de los recursos del pueblo, llegó lo que todos sabían y muchos decían, pero pocos respondían actuando responsablemente: Llegó la develación del gran desastre económico como consecuencia directa e injustificada del accionar de los detentadores del poder público.

Las diferentes alternativas presentadas para construir un sistema diferente de conducción del Estado, fueron una por una acalladas o desarticuladas,haya sido por decisión y fuerza de poder, o por conformismos de un sistema que evidentemente demostró estar agotado.Incluso algunos de los principales afectados en los desaciertos del gobernante apoyaron al sistema mismo, como si afilaran cuchillo para su propia garganta.

Con cada vez mayor impulso y menor decoro,las decisiones del poderpúblico fueron erosionando y devorando la clase media de la nación. La carga fiscal que tuvo que soportar la misma, conjuntamente con la clase popular compuesta por trabajadores del campo y la ciudad, se convirtió en una herramienta para la sumisión a las mismas y de burla cínica al trabajo honesto; toda vez que el propio pueblo que tributaba era testigo del despilfarro sin precedentes que se hacía con el dinero producido con el sudor de su frente. No había posibilidad de vida digna, de servicio de salud, ni mucho menos de poseer tierra ni vivienda, evidentemente luego de las fiestas no quedaba suficiente para “devolverle” en servicios al pueblo.

Estos factores económicos, políticos y sociales, que fueron construyéndose por espacio de varios años, llegaron al punto de inflexión y, a pesar de escaramuzas del gobernante para llegar a un supuesto pacto de nación, el pueblo decidió accionar, tomo las calles y se hicieron con un símbolo de dicha opresión con la toma de la Bastilla. Iniciándose así lo que hoy conocemos como la Revolución Francesa.

¿Acaso pensaban que este artículo describía la realidad dominicana? Bueno, cambiando fechas, nombres y pocos detalles más, lamentablemente parece ser una descripción precisa de nuestra actualidad. Solo faltará ver el desenlace. ¿Coincidencia?