La aprobación de este proyecto de ley que modifica el Código Penal Dominicano para sancionar a las mujeres que practiquen el aborto, pone de manifiesto el atropello de los derechos fundamentales de la mujer, como es el derecho a decidir qué hacer con su cuerpo y su vida. No apoyo el aborto indiscriminado, el que se practica por irresponsabilidad, sin embargo, el aborto que es necesario, ya sea por deformación del feto que impida su supervivencia, por VIOLACION, o porque ponga en riesgo la vida de la madre, es un derecho que se le está negando a la mujer, mancillando su dignidad, y rebajándola al papel social de "objeto para reproducción". ¿Sacrificar a la gallina de los huevos de oro por un solo huevo?
LAS MUJERES tenemos derecho a decidir si queremos o no continuar con un embarazo que ponga en riesgo NUESTRAS vidas, o haya sido producto de una violación, y el desarrollo de ese desenlace solo recordaría cada instante de ese enfermo acto, martirizando la vida de la mujer y quienes la rodean. ¿Entonces la mujer después de que la violan, también va a caer presa? ¿Va a ser castigada dos veces?
Es admirable como muchas mujeres que son violadas continúan con su embarazo, y se lo respeto, sin embargo, eso NO les da derecho a criticar y querer crucificar a aquellas valientes que prefieran continuar con los planes de sus vidas, para tratar de borrar la mancha indeleble de una nefasta violación.
Si por ignorancia, influenciada por sesgos religiosos, dejamos continuar un embarazo que no será fructífero porque el feto saldrá muerto, y sabiendo esto dejamos que la madre muera también, ¿no estamos violando el Derecho a la Vida del que tanto hablamos, del Artículo 37 de nuestra Constitución?
Si obligamos a una mujer que haya sido violada a vivir con el estigma de la violación y a aceptar las consecuencias sin darle la oportunidad de decidir, y sin importarnos su sentir, ¿no estamos violando el Artículo 38 sobre Dignidad Humana, el Artículo 42 sobre Integridad Personal, y el Artículo 44 sobre Intimidad y Honor Personal de nuestra Constitución? ¿O es que nuestra Carta Magna aplica para todos los ciudadanos menos para las mujeres? ¿Cómo e' la cosa?
Me da vergüenza ante los ojos del mundo, ver cómo los preceptos religiosos tienen influencia y poder de decisión en nuestra legislación soberana, aún en pleno siglo XXI, cuando nuestro país es laico, legislativamente hablando, donde existe libertad de culto y pensamiento, tal como lo expresa el Artículo 45 de nuestra Ley de Leyes, aún gran parte de la población sea confesional. El único sitio donde los religiosos deben legislar es en sus iglesias.
Los mismos que se autoproclaman "pro-vida" al estar en contra del aborto terapéutico, son los mismos que ignoran a los niños de la calle, en vez de acogerlos y adoptarlos, ya que esos niños representan los fetos que alguna vez ellos defendieron con tanta vehemencia.
¿Por qué será que no he visto una campaña tan intensa por parte de los líderes religiosos como la que ellos tienen contra el aborto terapéutico, para procurar justicia contra los abusos cometidos a nuestros niños dominicanos por el exnuncio Wesolowski, el cual responsablemente afirmo que fue encubierto por la propia Iglesia Católica, por el Episcopado Dominicano, y hasta por el mismo Papado; y muchísimos casos de violaciones por parte de los representantes de las iglesias, que si los menciono haría más largo este artículo? ¡Qué paradoja!
Y por favor, religiosos hipócritas, católicos y evangélicos, que son mayoría en nuestro país, ¿con qué cara, con que moral están ustedes "defendiendo" la vida, si en la historia de ambas religiones no hay más que sangre derramada de inocentes? ¿O es que ustedes no han dado una repasadita a sus respectivas historias? ¿Es que ustedes no saben que son los responsables del sacrificio indiscriminado de hombres, mujeres, niños, niñas, incluso ancianos y mujeres embarazadas, en nombre de su retorcida fe?
Pero está bien, si están tan en contra del aborto, ¿por qué se oponen a los principales métodos de prevención, como lo son los preservativos y los métodos de planificación? ¿Qué pretenden? ¿Dejar a las mujeres sin opciones? ¿Traer la misoginia y el machismo retrógrado de la Biblia a la legislación?
Es cuanto.