Si la empresa es como organización, lugar común de coordinación entre agentes y como institución, lugar de gestión de los conflictos y de los intereses de esos agentes en diferentes contextos y situaciones, ella es, en consecuencia, organismo multifacético, en tanto que se constituye en varias dimensiones: entidad legal, entidad administrativa, un pool de recursos físicos e intangibles y al mismo tiempo, base esencial y clave en las economías de mercado. Es la célula cardinal y única de la vida económica donde se construye la riqueza y la espina dorsal de una economía fuerte. Las empresas son el alma y corazón, la columna vertebral, el soporte medular de una economía fuerte y sana. Si ellas no están fuertes y sanas no puede haber una economía real fuerte y sana.

Las empresas, como necesario espacio de creación de riquezas, generadoras de empleos productivos y fuentes de articulación de retención de tributos y creadoras de ellos, precisan siempre de un Clima de Negocios. Ello explica que una economía pueda crecer; empero, si los indicadores de estas, sobre todo, las de los sectores transables de la economía (Agricultura, Manufactura local, Zonas Francas, Turismo) no crecen, la creación de empleos y la verdadera economía real no se sienten. Más allá del crecimiento fuera de ésta, estos crecimientos no son sostenibles ni verdaderamente sustentables.

¿Qué explica que en los años 90, la Agricultura, la Manufactura local, las Zonas Francas y el Turismo contribuyeran con el 43% del crecimiento del PIB y sin embargo, para el periodo 2000-2010 apenas sus aportes al PIB fuera de 21%; esto es, 120% menos?

Múltiples son las respuestas. El hilo conductor fundamental, debemos de buscarlo en la falta de un Clima de Negocios firme, consistente, sustentable, basamentado en políticas de Estado armonizadas y coherentes con las necesarias políticas públicas. Es el Clima de Negocios lo que propiciara la necesaria Innovación, como eje de apalancamiento de la Competitividad.

Clima de Negocios, como nos dice Leonardo Centeno "es el espacio que los gobiernos le proveen a las unidades económicas que se encuentran dentro de su jurisdicción, sean éstas potenciales o existentes". Clima de Negocios es el conjunto de condiciones que facilitan la actividad económica: Impuestos; Incentivos; Subsidios; Servicios de Formación Empresarial y de Recursos Humanos; Infraestructuras; Electricidad; Transporte; Tasa de Interés a bajo costo; Certidumbre en las reglas del juego; Contención de los conflictos sociales.

Para Claudia Luna Palencia el Clima de Negocios es la combinación de una serie de factores económicos, fiscales, sociales y políticos y con ingredientes adicionales, como la valoración de los sindicatos, servicios añadidos, outsourcing, actitudes laborales, idiosincrasia, productividad, seguridad, Estado de derecho y situaciones de conflictividad.

La expresión binaria por excelencia en una economía de mercado es: Empresa y Clima de Negocios. Este binomio es el vector catalizador de la Competitividad y en consecuencia, del crecimiento y sobrevivencia permanente e innovador de los negocios de un país.

Para un exitoso Clima de Negocios, hoy, se requiere una baja violencia, baja inseguridad, baja delincuencia, baja criminalidad. Todos estos factores no sólo enrarecen el Clima de Negocios, sino que hace a la sociedad más aprensiva y destruye la seguridad ciudadana y la confianza, perdiéndose paulatinamente el necesario círculo de armonía y solidaridad en una sociedad.

En el Informe No.37820 de Marzo del 2007 de las Naciones Unidas sobre Delincuencia, Violencia y Desarrollo, Tendencias, Costos y Opciones de Políticas Públicas en el Caribe; nos ejemplifica sobre el Impacto de la Tasa Anual de Crecimiento si se redujeran los índices de homicidios al nivel de Costa Rica:

República Dominicana           1.8% del PIB.

Guyana                                   1.7% del PIB.

Haití                                       5.4% del PIB

Jamaica                                   5.4% del PIB.

La criminalidad, la violencia, afectan el crecimiento de una economía al tiempo que dispara los costos de las empresas al tener que desviar recursos que no van directamente a la innovación y desarrollo de las mismas. Desvía la atención de los ejecutivos. Es lo que ilustrativamente nos dice Ignacio Méndez, Presidente de la Federación de Asociaciones Industriales, citamos "en un momento en que el objetivo de los empresarios es abaratar costos, el factor de la inseguridad pública los eleva". Más adelante, subrayó "tenemos que invertir grandes sumas de dinero en equipos y contratación de personal a causa de la delincuencia".

Hemos ido perdiendo Competitividad según el Índice de Competitividad Global 2011-2012. En esta oportunidad sacamos 110 de 142 países. Hace un año, de 139 países obtuvimos el 101. Y, para el 2009-2010 éramos el 95 de 139 países. Esto quiere decir que en apenas tres años hemos perdido 15 escalones en el ranking de competitividad mundial. El país que más ha ido perdiendo en Latinoamérica a lo largo de los últimos 3 años.

Esa pérdida de competitividad está mediada en gran medida por la profunda ceguera, una vasta miopía, falta de visión y compromiso con el futuro del país de la elite política y empresaria de nuestra sociedad. La de no comprender la importancia de la Innovación como factor clave para la Competitividad, que como muy bien señalara Joseph Schumpeter, consiste no sólo en desarrollar nuevos productos e introducir cambios en los procesos, sino también en nuevas formas de organización, nuevos mercados y nuevas fuentes de materias primas. Esa necesaria "destrucción creativa", que se logra a través de la innovación y la Tecnología; acusaron una disminución en el Índice de Competitividad Global 20110-2012.

Capacidad para la innovación: 126.

Calidad de las instituciones de investigación científicas: 123.

Disponibilidad de científicos e ingenieros:129.

Efectividad de la política antimonopolio: 122.

La principal fuerza motriz que impulsa y desarrolla el crecimiento económico es la creación y generación de nuevo conocimiento científico y tecnológico, que coadyuvarían a una mayor productividad, a una nueva dinámica de más empleo y por vía de consecuencia, a una mayor competitividad como país.

Aquel viejo paradigma enfocado en el funcionamiento de los mercados y en los procesos de acumulación de capital per se, han quedado atrás. Hoy se precisa, como elemento interno y consustancial a los procesos de producción: la Innovación y los avances tecnológicos. Es la Competitividad vital, neurálgica que posibilita el Clima de Negocios.

Para ello se requiere del necesario Clima de Negocios que nos conduce a los tres pilares de la Competitividad: BASICOS (Instituciones, Infraestructuras, Macroeconomía, Salud y Educación). MEJORA DE EFICIENCIA (Mercado, Tecnología, Negocios). INNOVACION (Innovación). Todos ellos enemigos de la corrupción, de la desigualdad, de la exclusión, de la delincuencia y de la violencia; porque al final, lo social cuenta para mejorar el Clima de Negocios.