El 23 de septiembre 2013 fue un día que marcó  nuestras vidas de forma drástica. Ya desde el 21 teníamos algunas informaciones de que la lucha sería más difícil, jamás creí que sería de esa magnitud.

Eran  próximo a las4:00 pm del 23 de septiembre 2013, cuando terminábamos un taller con un grupo de afectados a quienes dábamos acompañamiento emocional y psicológico cuando recibimos la noticia, fue desgarrante saber el dictamen y compartirlo con más 20 jóvenes ese día, cuantas lagrimas de mis compañeros y mientras trataba de consolar, dar ánimo y ser positiva, yo me estaba derribada  interiormente.

Recuerdo que junto al psicólogo Javier Peynado fue el día más difícil, pasar toda la noche al teléfono y las redes tratando de dar esperanza y ánimo, sin poder dejar salir mis lágrimas, que casi me ahogaban, aún siento ese enorme dolor al recordar palabras como “ ya que el tribunal me mató jurídicamente pues yo voy a terminar con mi vida”  hacen 5 años que se produjo el mayor genocidio civil, sin medir todo el daño que nos hicieron, no solo jurídico, sino emocional, psicológico y hasta material. Recuerdo dos jóvenes que literalmente intentaron suicidarse.

Esa nueva realidad era la peor pesadilla, ese día nos enterraron vivos, esa realidad nos confirmó algo que no conocíamos en detalle, nos convirtió en apátridas en nuestro propio país, nos llevó a recibir el mayor rechazo de gran parte de la sociedad.

Pero no hay mal que por bien no venga, ese día se puso en evidencia lo que por años denunciábamos y pocos creían, el exceso de los conservadores, el juego político de algunos, el odio y discriminación de otros, quedó en evidencia.  El 23 de septiembre 2013 se perpetúa la apatridia en República Dominicana de una for arbitraria, de espalda a toda norma nacional y internacional. ESAS PERSONAS, ESOS ROSTROS ESTÁN EN NUESTRAS COMUNIDADES, BARRIOS, BATEYES, Y TIENEN DERECHOS A VIVIR DIGNAMENTE.

El impacto lo podemos ver desde lo negativo y lo positivo.

En un primer momento todo parecía negativo:

1- No lográbamos asimilar lo que estaba pasando,  hubo mucha depresión lo que llevo a reforzar la jornadas de acompañamiento psico- emocional ( varios jóvenes tenían pensamientos de morir, dos llegaron a intentar suicidarse ) depresión en casi todos los afectados.

2-La sentencia reforzó el discurso nacionalista y cargado de odio.

3- agresiones físicas a afectados 

4-parecía una casería ver los inspectores de la Junta central electoral  (JCE) yendo a las casas de los afectados, ponerles a firmar documentos en blancos, obligar a los padres a dar información sin presencia de un abogado.

5- Ya habían procesos ante tribunales ordinarios para proteger derechos fundamentales por parte de los afectados y organizaciones, como contra respuesta aumento en más de 100% las demandas en nulidad ( la JCE pide a tribunales anular registros de nacimientos de afectados)

6- Miedo de muchos afectados a salir a la calle.

7- Lo más impactante fue ver cómo de forma drástica la vida civil se paraliza a tal grado que muchos ni podían ir a la escuela primaria por unos meses, los adolescente y jóvenes quedan sin poder hacer absolutamente nada que requiera un documento de identidad ( ir a la escuela, universidad, trabajar, seguro médico, registrar a sus hijos, comprar o vender, hasta el libre tránsito)

Estás por señalar a grandes rasgos algunos impactos. Siendo la mujer y niños los más vulnerables. Las mujeres si son boronas de valencia no tienen accesibilidad a justicia, los niños no pueden ser registrados para obtener documentos si la madre es afectada.

6- Los dominicanos están con opiniones divididas, producto de la confusión que generó la sentencia se unos apoyando a los afectados otros apoyando la sentencia 168/13

7-Una ley (169/14)que divide a los afectados (discrimina segrega, generada ciudadano de 2,3 categoría y produce apatridia)

8- Aumentó el riesgo de ser defensor de derechos de migrantes y su descendientes. 

Impacto positivo :

1-Visibilizar nuestro problema y su alcance

2-Solidaridad nacional e internacional 

3-comprometer al Estado a buscar soluciones 

4-ponerle rostro a los afectados 

5- visita In Locus de la Comision Interamerica

6- crear comité de solidad con desnacionalizados

7- solidad de organizaciones nacionales e internacionales, 

8- Pronunciamientos de personalidades y organizaciones condenando y rechazando la sentencia.

Ente otras cosas, quisiera terminar señalando la 169/14 como un un punto intermedio ente lo negativo y positivo’ pues a 5 años, aún hay personas que no han recibido su documento de vuelta, otros fueron extranjerizados mediante un proceso de naturalización que no se define, y la inmensa mayoría de los afectados quedan apátridas sin ningún mecanismo por parte del Estado para restituirles el derecho a la nacionalidad.

Hoy enfrentamos un rechazo cargado de odio, discriminación, prejuicios, que se expresa en algunos lugares de forma sutil, y en otros abierto y desbordante.

Mientras nuestras autoridades y el Estado quieren tratar el problema a discreción, evitando sentar en la mesa de diálogo a los afectados, y buscar soluciones a medias, seguiremos por mal camino. La APATRIDIA es real en REPÚBLICA DOMINICANA, tiene rostro, jamás se podrá ocultar esa realidad.

Vamos a crear una mesa de trabajo real, que nos lleve a restituir los derechos vulnerabilizados, que promuevan el respeto a la dignidad, Sin prejuicios.

El dolor, la frutración y la tristeza aún está presente en nuestras vidas, la sentencia convirtió en ciudadanos de ningún lugar.

A pesar de todo Hoy somos más fuertes y conscientes de nuestra realidad, convencida de que continuaremos luchando por nuestro derecho, la resiliencia es una de nuestras virtudes.