Familia ruin.
Sus Ojos.
Ciudades y Campos.-
Señores familiares hasta primo tercero:
Por la presente quiero informarles que a partir del 12 decidí hacer una pausa en mis funciones en el Palacio. En otras palabras: cero sueldazo, cero yipeta nueva, cero chofer, cero chequera, cero facetime con Danilo, y hasta entregué la llave de oro que la Vice, tan piadosa dama de buen gusto, me obsequió como autorización de lujo para usar su baño privado, con un inodoro que canta.
He caído, ingenuamente, en una trampa. Cualquiera pensaría que aquí el problema está en los ingresos, esa es una discusión y debate superado por la Contabilidad. Cuando mi nuevo presupuesto se calculaba, se presentaron los mismos montos, los mismos gastos cientos de veces y fueron rechazados por mi Diácono que también es Contador. Por tanto el Regalo Navideño es sólo una excusa. Dado que es un imperativo que toda persona humana reciba regalos, independientemente de si está envuelto o no; sobra preguntarse, ¿reciben más regalos y canastas en Navidad los que tienen un familiar sacerdote guisando en el Gobierno?
De lo que se trata es de Regalos Navideños, no de religión ni de dogmas católicos. ¿Quién nos ha enloquecido haciéndonos creer que tenemos derecho a esperar un regalo navideño caro, pongo por caso una TV Samsung de 52 pulgadas, por el hecho de ser primo segundo de un sacerdote funcionario? Esto no resiste un minuto en la Economía Familiar.
Ustedes saben familiares, por la experiencia en sus presupuestos, como bajan los ingresos deben bajar los gastos. Saben, de sobra, que sus gastos esporádicos deben ser ajustados proporcionalmente a la falta de liquidez, efectivo, cash, y la provisión para gastos fijos no puede ser debitada para lujos. Muchos sacerdotes exfuncionarios, tristemente, se encuentran entre la deuda a un prestamista peligroso que se viene a confesar diariamente, las llamadas constantes de 3 abogados de un Banco que les prestó y el reclamo enérgico de un Cardenal que también les prestó pero al módico 20, y con garantía colateral de jurar sobre la Biblia que el primer pago sería el 1ero de Diciembre, y sin rogadera de prórroga en nombre de la Santísima Trinidad, o de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, o de su Asunción al Cielo ni de otros dogmas debidamente definidos por la Iglesia.
Y me he quedado sin saber los precios de los regalos navideños que los han convencido que son los mejores para ustedes. Es igualmente triste si eran caros. Desde ahora les advierto que más vale que sean los precios de medias deportivas, muñecas cierra ojos, correas reversibles, parché chino, ganchitos, pistolas de agua y de mito, peinetas, y raquetas de Ping Pong (sin peloticas ni mesa).
Pido, públicamente, perdón al Familiar y a cuantos primos pude forjarles la imagen de un regalo navideño caro que yo creía comprar, pero me he equivocado.
Oramos por la Resignación, doña Niña, sólo Dios sabe el regalo navideño que ella tenía en mente antes de enterarse de mi renuncia. La decepción de unas medias deportivas también la incluye a ella.
Pueden seguir contando con toda la ayuda de mi parte siempre y cuando esta consista en un consejo o en una misa.
Sí, ya sé, con esta renuncia sin pensar he dañado nuestra Navidad.
Dios tenga misericordia de nosotros los ruin.
P. manuelruin