El miércoles pasado en la tarde los familiares de Carlos Pimentel se reunieron al lado de su féretro en la funeraria Blandino para oir las canciones predilectas de él, antes de partir hacia el cementerio. Escuchabany tarareaban entre lágrimas “Cantares” de Joan Manuel Serrat:“
"Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar. Nunca perseguí la gloria, ni dejar en la memoria de los hombres mi canción; yo amo los mundos sutiles, ingrávidos y gentiles, como pompas de jabón. Me gusta verlos pintarse de sol y grana, volar bajo el cielo azul, temblar súbitamente y quebrarse. Nunca perseguí la gloria… Caminante, son tus huellas el camino y nada más; caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace camino y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar”.
Mientras tanto, mi memoria se proyectaba a los años finales de la década de 1960 y mediados de 1970, cuando Carlos Apolinar Pimentel Rivera (Carlitos para sus allegados) descollaba como líder estudiantil y político.
Reflexioné brevemente sobre aquella generación nacida a lo largo de la década de 1940, a la cual le tocó vivir la mayor parte de su adolescencia y juventud durante el periodo más turbulento de la historia dominicana del siglo XX,que abarcó: los dos años finales de la Era de Trujillo (junio 1959-mayo 1961), la transición postrujillista (1961-65), la Guerra de Abril de 1965 y Los 12 Años de Joaquín Balaguer (1966-78).
Carlos Pimentel formó parte de esa pléyade de jóvenes, mayormente de origen urbano, que luchó por empujar cambios en la sociedad que conocieron, a la que consideraban, ante todo, injusta. Lograr justicia fue la meta de esos jóvenes y su motivación estuvo arraigada en los ideales que enarbolaron. Esas metas se sintetizaban en el lema del 14 de Junio de Manolo Tavárez: “Pan, tierra, trabajo y libertad”. Este lema no surgió de la nada, compendiaba en cuatro palabras las aspiraciones de la población dominicana tras la caída de la dictadura trujillista. Y extendidas decían: “Tierra para los que son hijos de esta tierra, trabajo para los que quieren hacerse un porvenir feliz, pan y libertad para todos los dominicanos”.
Recuerdo bien a CarlosPimentel pues fuimos compañeros en la dirigencia del Bloque Revolucionario Universitario Cristiano (BRUC), luego cambiado a Camilista tras nuestro desprendimiento del Partido Revolucionario Social Cristiano (PRSC) y la fundación en 1970 de los Comités Revolucionarios Camilo Torres (Corecato).
Recuerdo vívidamente a Carlitos cuando integrábamos el disciplinado y compacto grupo de 25 o 30 delegados del BRUC reunido en el Aula Magna durante el Claustro. Yo encabezaba el comité de facultad del BRUC en Agronomía mientras Rafael Camilo y Carlos eran los dirigentes en Economía;Andrés María Guerreroy Radhamés Castillo Mesa en Ingeniería, entre otros. Actuábamos motivados solo por nuestros ideales de justicia.
Lo he dicho en esta columna y lo repito. En aquellos años los representantes estudiantiles no recibíamos ninguna clase de beneficio. Aparte de los magros emparedados de jamón y queso acompañados de un vaso de leche que las autoridades ordenaban cuando los claustros electorales se prolongaban mucho, los delegados estudiantiles no recibían nada material de la Universidad.
Carlos Pimentel Rivera se graduó de sociólogo. Su carrera se extendió a la docencia, aunque nunca abandonó el activismo social. En este campo, fue fundador del Centro de Planificación y Acción Ecuménica (CEPAE), Participación Ciudadana y el Centro de Documentación del Caribe (Cedoca).
Hoy rindo tributode recordación a mi amigo y antiguo copartidario Carlos Apolinar Pimentel Rivera, junto a nuestros tempranos mártires Salomón Lama Beras y Mirtha de la Rosa. También evoco en mi memoria, entre otros, a los antiguos dirigentes y militantes del BRUC, la JRC y el MLN-CorecatoFrancisco Mariano, John Gerald Isaac, Juan B. Chalas, Héctor B. Keppis, Ivette Arvelo, Radhamés Castillo Mesa, Rafael Vázquez, Julio Rosa León, Wilson Encarnación, Andrés María Guerrero, Rafael Camilo, Fernando Díaz Céspedes, Leonardo Mercedes Matos, Clara LamaBeras, Damián Santos, Luis Vargas, Celedonio Jiménez, Ricardo Winter, Rafael Tomás Carvajal, Ramón Bienvenido Martínez Portorreal, Alfredo Fernández Dotel, Nelson Santos, Daniel García Archibald, Miguel Cocco Guerrero, Maximiliano (Max) Rabelais Puig, Santiago Sosa y Santiago Hirujo Sosa.