Si usted designa un equipo de estrategia para su campaña política que sea el mismo que ha usado el actual Presidente de la Republica y su partido en las 3 últimas campañas electorales, no puede esperar que los métodos y argucias utilizados por esa gente sean diferentes a las que usaron en el pasado. Esos tipos son expertos en hacer campaña sucia y robarse todo el dinero posible del erario público para aferrarse al poder, como lo han hecho en cada elección.
Danilo Medina fue víctima de esa misma campaña sucia cuando se enfrentó a Leonel Fernández en el 2007 en las elecciones internas de su partido para elegir al candidato a la presidencia que terciaria en las elecciones de mayo del 2008. Al ser derrotado, declaró que había perdido contra el Estado Dominicano y no contra un candidato, refiriéndose a uso indiscriminado de los recursos públicos para apuntalar la candidatura de Leonel. Pero también fue víctima de difamaciones y desconsideraciones de la propia gente que hoy forma parte de su equipo de campaña.
¿Por qué Danilo acepta a ese mismo equipo, adeptos incondicionales de Leonel Fernández, en su entorno más íntimo? Porque entendió que no tienen fuerza para alejarse de Leonel, ignorarlo, o inclusive atacar muchas de las barbaridades que ha cometido este gobierno. Decidió flotar o hundirse con la misma gente sin importar si son señalados como reconocidos corruptos, impíos, despilfarradores de los recursos públicos y culpables de hasta violar la propia Constitución de la Republica.
Obviamente, se está jugando una carta peligrosa, porque desde mi punto de vista, hoy en día, Leonel es más impopular y tienen menos aceptación que Danilo. Pero su alianza estratégica con los poderosos miembros del PLD, que están incondicionalmente comprometidos con su presidente y que son señalados como responsable de los mayores actos de corrupción, despilfarro y mala administración de los recursos públicos, lo llevará irremediablemente al mismo nivel de aceptación de Leonel o por debajo de este, que trata desesperadamente de limpiar un poco su deteriorada imagen pública al margen del candidato de su partido.
Y hablando de campaña sucia, Danilo cae también en la trampa que le tiende su equipo de campaña, acostumbrado a revolcarse en la basura del proselitismo escabroso, ofensivo, insultante y deshonesto, y se deja arrastrar por esa bajeza. Lo mismo hará cuando le comience a llegar mucho dinero del erario público para su campaña, lo que tendrá un rechazo virulento de todas las organizaciones de la sociedad civil y de los partidos de oposición. Si no se frena ese intento con tiempo, podríamos hasta no tener elecciones el 16 de mayo del 2012, porque ya el país no aguanta más sinvergüencerías como esa, en un momento en que la situación económica interna y externa está al borde de una crisis de grandes dimensiones.
El otro problema es lo que el candidato del PRD Hipólito Mejía usaría como arma para contrarrestar esa campaña sucia, que ya suena en los comerciales de radio y televisión. Yo le recomendaría que no lo hiciera por el momento hasta esperar si la propia opinión pública presiona a Danilo y a sus estrategas para que eliminen esos comerciales insultantes y ofensivos contra el candidato del PRD.
Sería lo más saludable para el país y para ambos candidatos, aunque Danilo se encuentre 20 puntos por debajo de Hipólito. Total, si Danilo persiste en esa bajeza, es probable que el margen de diferencia se amplíe y no de ser así, entonces que se prepare a recibir la misma medicina.
En fin, la pelota está en manos de la opinión pública. De las asociaciones empresariales, profesionales, sindicales y agropecuarias. De las instancias no gubernamentales que desean unas elecciones transparentes y limpias. También lo está en manos de los medios de comunicación y de la propia iglesia. Todos deben exigir un freno a cualquier intento de empañar esta campaña con insultos y ataques personales que pueden llegar a ofender la dignidad del contrincante y de su propia familia.
Deténganlo, porque hay mucho material de parte y parte para arrojarle basura a todo el proceso electoral y eso jamás cambiará la decisión de un pueblo que esta hastiado de un gobierno que se ha convertido en una pesadilla para este país.