Si en el día de Navidad se celebra el nacimiento de Jesucristo tambien en lo adelante se deberá celebrar el comienzo de una era de clarividencia sobre algunas creencias religiosas y misterios siderales. Con el lanzamiento exitoso el pasado sábado del cohete que lleva al espacio al Telescopio Espacial James Webb de la NASA, “el mayor instrumento científico que se haya soltado en el espacio”, se marca un enorme hito espacial. A medida que este instrumento amplie nuestra visión del cosmos se abre la posibilidad de que nuestras hipótesis sobre la creación se modifiquen. Y al penetrar el espacio más lejano tal vez podremos descifrar si es verdad que en el existe orden y armonía. 

Venciendo las limitaciones de los telescopios terrestres, la NASA había comenzado a escudriñar más profundamente el cosmos cuando en 1990 puso en órbita el Telescopio Espacial Hubble. Según NASA “Hubble ha revitalizado y remodelado nuestra percepción del cosmos y ha descubierto un universo de maravillas inesperadas. El Hubble ha revelado propiedades del espacio y el tiempo que durante la mayor parte de la historia humana solo fueron investigadas en la imaginación de científicos y filósofos. Hoy en día, el Hubble continúa proporcionando vistas de maravillas cósmicas nunca vistas y está a la vanguardia de muchos nuevos descubrimientos.” 

Sin embargo, la potencia y capacidades del Hubble serán superadas cien veces por el James Webb, Nombrado en honor al segundo administrador de la NASA que supervisó el primer aterrizaje lunar, la superioridad del Webb es extraordinaria. “Hubble se encontraba a unos 600 kilómetros de la atmósfera, a diferencia de su sucesor que estará a más de 1.6 millones de kilómetros.” “Webb tendrá una capacidad de visionado muy superior a la de su predecesor. El Hubble precisaba un espejo primario de 2,4 metros de diámetro, a diferencia del Webb que cuenta con un cristal de 6,5 metros. Además, podrá ver la primera luz del universo emitida por los primeros grupos de estrellas de las galaxias configuradas hace más de 13.000 millones de años.”

CNN ha producido en ingles un extenso documental sobre el Webb que solo esta disponible en Estados Unidos. Pero para una mejor idea del significado del Webb aquí basta con reproducir algunos párrafos de un reciente reporte de CNN escrito después del despegue del cohete, el cual sucedió en la estación espacial de la Agencia Espacial Europea en Guyana Francesa. La traducción es de Google.

“El observatorio viajará durante aproximadamente un mes hasta que alcance una órbita a aproximadamente 1 millón de millas (1,6 millones de kilómetros) de distancia de la Tierra. Durante esos 29 días, Webb desplegará sus espejos y desplegará el parasol. Este proceso involucra miles de partes que deben funcionar perfectamente en la secuencia correcta. Afortunadamente, cada paso se puede controlar desde el suelo en caso de que haya problemas.” “Y luego pasará por un período de puesta en marcha en el espacio que dura seis meses. Eso incluye el enfriamiento de los instrumentos, la alineación y la calibración. Todos los instrumentos pasarán por un proceso de pago para ver cómo funcionan.”

“El telescopio Webb observará cada fase de la historia cósmica, incluidos los primeros resplandores después del Big Bang que creó nuestro universo y la formación de las galaxias, estrellas y planetas que lo llenan hoy. Sus capacidades permitirán al observatorio responder preguntas sobre nuestro propio sistema solar e investigar señales débiles de las primeras galaxias formadas hace 13.500 millones de años. 

El telescopio observará más de cerca una selección de exoplanetas para mirar dentro de sus atmósferas, si los tienen, y ayudar a responder preguntas sobre cómo se formaron y evolucionaron los planetas. Los datos recopilados por el telescopio pueden decir a los científicos si el metano, el dióxido de carbono o el monóxido de carbono están en la atmósfera. Los gases dentro de estas atmósferas alienígenas podrían revelar los bloques de construcción de la vida. 

Otros objetos de interés para la campaña científica inicial incluyen la observación del agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Láctea, la formación activa de sistemas planetarios, cuásares brillantes en el centro de las galaxias y las sobras de la formación de nuestro sistema solar conocidas como los Objetos del Cinturon de Kuiper.”

Estas capacidades del Webb reconfiguraran la Astronomía y la Astrofísica. Sus revelaciones cambiaran los paradigmas de las ciencias espaciales, tal y como Alfred Kuhn las describió en su obra “La Estructura de las Revoluciones Científicas”. Pero lo mas excitante es la posibilidad de que los nuevos descubrimientos siderales cambien tambien las creencias religiosas de un gran parte de la humanidad. De paso podremos confirmar si existen o no otros seres en nuestra galaxia (Vía Láctea) o si estos están ubicados en la galaxia vecina (Andrómeda). Con una sonda que órbita alrededor de nuestro sol la NASA estudia actualmente sus particularidades, con el Webb talvez será posible investigar sin sondas a nuestra estrella mas cercana (Próxima Centauri). La suerte está echada: el Webb cambiara nuestra cosmovisión.